La izquierda se rebela contra la izquierda

L.L. Álvarez/M.Palacio

MADRID- La izquierda no acierta con su estrategia. Sin saber aún cómo encajar el auge de los diferentes grupos surgidos al amparo del 15-M y otros movimientos de corte más radical. En una búsqueda por conectar con estos movimientos, los de Cayo Lara han errado en su elección de aliados. Y es que ayer se conoció la detención el pasado domingo de Yago, un anarquista amigo de «Alfon», el utraizquierda vallecano que pasó dos meses en la cárcel por tenencia de explosivos y al que Cayo Lara defendió hasta las puertas del Congreso.

Yago Eduardo Torroba, de 27 años, y del mismo corte radical de «Alfon» iba con éste el 14-N de 2012, día de la última huelga general, cuando la Policía les sorprendió con una mochila con explosivos. Mientras los agentes identificaban a «Alfon» y a su novia, Daria Cros, Yago huyó logrando que no le detuvieran hasta enero. Durante ese tiempo, «Alfon», miembro de los Bukaneros (radicales del Rayo Vallecano), permaneció encarcelado, convirtiéndose en icono de la extrema izquierda. Toda Izquierda Unida, con Cayo Lara a la cabeza, así como el resto de grupos que integran la izquierda parlamentaria, no dudaron en ponerse en primera fila tras las pancartas que exigían «Libertad para "Alfon"», al que convirtieron en estandarte de sus ataques al Gobierno central.

Lara y sus compañeros en la Comunidad de Madrid, Eddy Sánchez y Gregorio Gordo, realizaron varios actos con la madre de «Alfon»; portaban camisetas, pegatinas y chapas en el Congreso y no faltaron en las concentraciones para exigir la salida de la carcel del joven.

El chico, de 21 años, y su amigo Yago, llevaban el 14-N dos botellas de medio litro de gasolina, unidas con esparadrapo a varios paquetes de metal, metralla y a una mecha. Sin embargo, los de IU llegaron hasta el ministro del Interior para pedir su excarcelación al asegurar que su detención y estancia en la prisión de Soto del Real respondía a una acción «arbitraria y ejemplarizante». Para IU, «Alfon» era una víctima de la «represión» del Gobierno. Ayer, sin embargo, la formación no dijo nada sobre la detención de Yago, al que detuvieron en enero por los mismos motivos que a «Alfon». Y es que ayer la detención se produjo por ataques a su sede. Probablemente, ayer se quedaron sin palabras tras conocer que el amigo de «Alfon» había intentado quemar su oficina de la calle Hierbabuena, en Tetuán. Reventó la ventana con una cerveza y lanzó un cóctel incendiario junto a papeles de propaganda política. En la habitación apenas había muebles, por lo que el incendio no se extendió.

La formación madrileña, que lidera Eddy Sánchez, ha sufrido en los últimos meses amenazas y ataques en sus sedes con pintadas en las que se ha leído «traidores» o «moriréis». A la de la calle Hierbabuena le «tocó» abril. La coalición de izquierdas acusaba a grupos fascistas de los ataques . Ayer supo que no era así en todos los casos. Que el ataque con material incendiario en Hierbabuena fue obra del amigo de «Alfon».

A pesar de que no tiene residencia fija, los agentes tenían la sospecha de que Yago planeaba cambiar de casa «okupa» en los próximos días, por lo que el domingo, a las14:00 horas, le detuvieron en la calle Bravo Murillo, a sólo tres manzanas de Hierbabuena, en el marco de la «operación Budo» llevada a cabo por el Grupo XXI de la Brigada Provincial de Información, en colaboración con la Comisaría de Distrito de Tetuán y la Brigada Provincial de Policía Científica de la Jefatura Superior de Policía de Madrid. El detenido durmió anoche en la misma cárcel de Soto del Real en la que su amigo «Alfon» estuvo 56 días. Para la Policía, ambos pertenecen al núcleo más duro del anarquismo en Madrid. Por su ataque a la sede de IU Yago Torroba se enfrenta a los delitos de daños, tentativa de incendio y contra los derechos fundamentales. Fuentes de la investigación apuntaron que tanto su ataque a la sede de Hierbabuena, así como anteriores casos por los que cuenta con antecedentes, estuvieron motivados por un «odio ideológico» y más concretamente, según la investigación, un odio dirigido hacia los partidos políticos del entorno comunista.

A Yago Eduardo Torroba no le apoyó ayer ningún partido de la izquierda; sí lo hizo un grupo de unos 30 anarquistas, que a su salida de los juzgados en el furgón policial, gritaron proclamas como «Abajo los muros de las prisiones».

A los juzgados, en este caso al número 26 de lo Penal de Madrid, tendrá que acudir hoy su amigo «Alfon». Y es que, unos mese antes de ser detenido con un artefacto con metralla el día de la huerlga general, el 19 de junio de 2012, el joven vallecano habría dado una paliza a unos agentes de la Policía Nacional que estaban realizando un control de tráfico, por lo que se enfrenta a una pena de dos años y tres meses de cárcel por un delito de atentado a un agente y por lesiones.

La lucha de IU por la libertad de «Alfon»

Las camisetas, pegatinas y pancartas que pedían «libertad para "Alfon"» adornaron durante 56 días el pecho de los diputados de Izquierda Unida en 2012. Había sido detenido en la huelga general del 14-N cuando se dirigía junto su amigo Yago, ayer detenido, a un piquete informativo y llevaban en una mochila una bomba casera con metralla. IU, sin embargo, defendió su excarcelación (estuvo 56 días en prisión preventiva) al defender que había sido víctima de la política «represiva» del Gobierno. Cayo Lara hizo suya la causa de «Alfon». La madre del anarquista de 21 años llegó a participar en la asamblea en la que fue elegido coordinador y en la que los casi mil delegados homenajearon al joven y a su madre entre gritos de «Alfon libertad» y «El pueblo unido jamás será vencido». Ayer IU no se pronunció sobre la detención del amigo de «Alfon» por atacar su sede.

El perfil

«Alfon» Fernández

Un bukanero aprendiz de la «kale borroka»

Lo que une a «Alfon» y a Yago, detenido ahora por el ataque a la sede de IU, va más allá de lo que les sucedió a estos dos compinches durante los violentos altercados de la huelga general de 2012. Aquel 14-N corrieron suerte distinta. «Alfon» fue detenido junto a su novia por portar botellas de líquido inflamable, clavos y tornillos. Yago logró huir, pero no pudo dar esquinazo a la Policía meses después. Los cuatro años que les separan nunca fueron un obstáculo en la amistad que estos jóvenes fraguaron al calor de los movimientos anarquistas madrileños. Durante los meses que pasó en prisión preventiva, el bukanero «Alfon» fue elevado por la izquierda antisistema más radical a la categoría de héroe. A sus 22 años, este joven de Vallecas ya arrastraba una trayectoria salpicada de encontronzados con la Policía. Pero más allá de sus antecedentes, lo que más alarma a los investigadores es el alto grado de violencia que jóvenes como «Alfon» pueden llegar a emplear, lindante en muchos aspectos con la «kale borroka». Violencia extrema, pero siempre ligada a una motivación ideológica. Y con el manual del antisistema bien aprendido: asegura luchar contra una «policía represora», contra la «derecha ultraconservadora» y por una nueva «política revolucionaria». El joven volverá hoy a juicio, por dar presuntamente, en junio de 2012, una paliza a unos agentes de la Policía Nacional.