Alcorcón

Madrugada de violencia sindical en Fuenlabrada y Alcorcón

Un grupo de radicales atacó con cócteles Molotov la planta de Coca-Cola

Un bombero de Alcorcón trata de sofocar las llamas de una hoguera en una de las montañas de basura
Un bombero de Alcorcón trata de sofocar las llamas de una hoguera en una de las montañas de basuralarazon

Dos conflictos laborales, los derivados de la huelga de basuras en Alcorcón y del posible cierre de la planta de Coca Cola en Fuenlabrada, desembocaron en incidentes en la madrugada del jueves al viernes.

En Fuenlabrada, un grupo de radicales arrojó cinco cócteles Molotov en la entrada de la planta de Coca-Cola, mientras trabajadores de la empresa protestaban por los despidos anunciados por la multinacional. Según fuentes de la Jefatura Superior de Policía, el ataque se registró en torno a las 5:30 horas. Inmediatamente después, efectivos de la Policía Científica y de los Tedax se personaron en la planta para recoger los restos de los explosivos y analizarlos. Los agentes comenzaron también a investigar la identidad de las personas que arrojaron los artefactos. Una vez apagadas las llamas, los miembros de la Policía desplazados al lugar pudieron apreciar cómo algunos de los cócteles Molotov estaban formados por un recipiente de plástico y una mecha. Algunos tenían líquido inflamable en su interior mientras que alguno estaba relleno de una sustancia blanca. Precisamente el hallazgo de esta sustancia fue el que motivó a los agentes a llamar a los Tedax.

En el terreno meramente laboral, el presidente de la Comunidad, Ignacio González, anunció ayer haber encargado expresamente a la consejera de Empleo, Turismo y Cultura, Ana Isabel Mariño, que entable diálogo con el Comité de Empresa de Coca-Cola: «Lo que vamos a hacer desde el punto de vista de la Comunidad y las escasas competencias, es apoyar todas las reivindicaciones razonables que están planteándose por los trabajadores y exigir el máximo rigor en la aplicación de la normativa a los efectos de este ERE». Por su parte, el viceconsejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Enrique Ruiz, señaló que la región es el «centro estratégico logístico» en el que Coca-Cola «tiene que estar». Ruiz también señaló que la administración regional está «hablando con la dirección de la empresa», con el objetivo prioritario de «tratar por todos los medios de evitar que se produzca el ERE».

Por su parte, la ciudad de Alcorcón vivió ayer un nuevo día de la huelga convocada por algunos de los sindicatos representados en la empresa Esmasa. Son ya once días desde que comenzaron los paros y, por segunda jornada, los equipos de Tragsa se encargaron de la limpieza de algunas zonas de la ciudad. En concreto, completaron dos rutas, en los barrios de Fuente Cisneros y Parque Oeste. Precisamente en este último punto, en la calle Oslo, se registraron a lo largo de la mañana algunos momentos de tensión cuando los trabajadores de Tragsa eran increpados por los piquetes de Esmasa. Cada uno de los equipos de Tragsa está integrado por un camión volquete y una excavadora, además de ocho trabajadores que, por razones de seguridad, son escoltados por varios vehículos policiales. Los mayores incidentes se registraron por la noche, cuando grupos de radicales provocaron la quema de más de una veintena de contenedores en varios puntos de la ciudad. Una de estas acciones terminó calcinando también un vehículo que se encontraba estacionado en las inmediaciones.

Tal y como confirmó el jueves el consistorio, el coste de los trabajos que tendrá que realizar Tragsa hasta que queden normalizadas las tareas de recogida de basuras serán descontado de los próximos pagos que el Ayuntamiento abone a Esmasa. El cálculo hecho por el Ayuntamiento señala que cada día de trabajo de cinco equipos de Tragsa supondrá una penalización de 15.000 euros para las arcas de Esmasa. En este contexto, la concejala de Seguridad, Laura Pontes, afirmó ayer que, «según los informes de Sanidad, Alcorcón está en alto riesgo para la salud de la población», lo que hacía necesaria la intervención de Tragsa.