Alcorcón

Un pacto que ponía fin a la huelga en Alcorcón duró sólo diez horas

Los trabajadores se lo saltaron a primera hora de ayer exigiendo condiciones que no habían acordado

Un pacto que ponía fin a la huelga en Alcorcón duró sólo diez horas
Un pacto que ponía fin a la huelga en Alcorcón duró sólo diez horaslarazon

Pasada la medianoche de ayer, casi a la una de la mañana –después de 13 días de huelga, con basuras en las calles, con 15 detenidos y 21 policías heridos–, la dirección de Esmasa y los representantes de los trabajadores llegaron a un acuerdo verbal para poner fin al conflicto de las basuras en Alcorcón. A las 11 de la mañana, dicho pacto saltaba por los aires.

Lo hablado se selló con un apretón de manos y consistía en que empresa y Ayuntamiento se comprometían, en el próximo pleno municipal, a dejar por escrito que Esmasa seguiría recogiendo el cartón, los envases y el material orgánico de las calles (algo que en ningún momento han puesto en duda ni empresa ni Ayuntamiento). Del vidrio se encargaría Ecovidrio pero los puestos de trabajo dependientes de esa actividad quedarían garantizados dándoles, si fuera necesario, nuevas tareas para mantenerlos.

A cambio, los trabajadores se comprometían a terminar con la huelga y las acciones de protesta y recogerían los miles de kilos de desperdicios que se acumulan en la ciudad.

A la mañana siguiente, en una asamblea de trabajadores, éstos se negaban a dejar la huelga si dichas condiciones no estaban por escrito, algo que no solicitaron en el momento en el que se habló y sobre lo que no existía inconveniente alguno por las otras partes implicadas, según aseguran a LA RAZÓN.

Pero lo cierto es que tras la reunión de los empleados, Álvaro Sánchez, uno de los portavoces del sindicato CSI-F, señaló que la propuesta «en lugar de boquilla» debe estar «por escrito» y ser aprobada en un pleno municipal extraordinario.

El alcalde de la localidad, David Pérez, se enteró de la rotura del pacto pocos minutos después de que se produjera y aseguró, visiblemente enojado, que «con unos altercados que han arrasado con la ciudad, con una acumulación de basuras que es una amenaza contra la salud y con unos ciudadanos que ya está hartos de este chantaje al que se está viendo sometida la población por parte de los convocantes de la huelga... Es una gravísima irresponsabilidad que en estos momentos no se haya desconvocado la huelga». Fuentes municipales aseguraban después que «no hay acuerdo porque los sindicatos lo han roto por segunda vez. Se había dicho que se desconvocaba la huelga y después se negociaba, no al revés. Ahora mismo, hoy por hoy, está el acuerdo roto. Así que mientras haya huelga no se va a firmar nada».

200.000 euros en destrozos

Pérez recordó que, tras la situación de «extrema violencia que ha vivido el municipio» en la noche del sábado, los costes para la ciudad se elevarían a 200.000 euros y que éstos caerán sobre los convocantes de los paros. «Todos los gastos que estamos teniendo con estos destrozos, estos sabotajes, este vandalismo y estas huelgas injustas que estamos sufriendo, serán repercutidos a los responsables». Durante los altercados, ardieron 166 contenedores de basura en el municipio y se declararon otros 59 incendios por toda la ciudad.

Durante estos enfrentamientos, 21 policías resultaron heridos, algunos de ellos con importantes heridas en la cabeza (uno de ellos recibió más de 20 puntos de sutura en la cabeza) mientras que otros presentaban cortes en la cara y diferentes contusiones o torceduras de articulaciones.

Por su parte, el presidente de la Comunidad, Ignacio González, aseguró ayer que detrás de los disturbios en Alcorcón están los movimientos «antisistema» alentados por «partidos de izquierda» y pidió a la Policía y a la Justicia «contundencia» para evitar esta «barbaridad». El presidente regional aseguró que estos grupos están dispuestos a acabar con el Estado de Derecho y opinó que las protestas son «una demostración más del mal uso por parte de algunos del derecho a reclamar sus condiciones laborales».