La newyorkina avenida de los multimillonarios tiene un nuevo vecino

Que Nueva York es una capitales del mundo donde más millonarios habitan por metro cuadrado no es ninguna sorpresa. Algunas de las mayores fortunas del globo terráqueo disponen en la Gran Manzana de auténticos tesoros inmobiliarios. Y la mayoría de ellos se encuentran en la isla de Manhattan, y más concretamente en el lado sur de Central Park.

Todos hemos visto alguna vez en una serie o película esos impresionantes rascacielos con un portero que viste de azul y lleva gorra, en la puerta recibiendo a sus exclusivos huéspedes. Rascacielos que si por fuera impresionan, los secretos que guardan en su interior son todavía más sorprendentes. Por eso, hay un conjunto de ellos a los que se les conoce como Billionaires’ Row. Se trata de un conjunto de edificios residenciales de lujo que alberga a las mayores fortunas del mundo. Tanto que algunas de las casas más caras del mundo se encuentran situadas en uno de estos rascacielos, que incluso han conseguido modificar el famoso skyline newyorkino.

Un contexto en el que recientemente se ha producido unas de las mayores transacciones inmobiliarias de la ciudad de Nueva York de todos los tiempos. Porque un misterioso comprador se ha hecho con dos viviendas por un precio de 157,5 millones de dólares. El privilegiado comprador, del que se desconoce cualquier tipo de detalle, ha pagado 82,5 millones de dólares por un espectacular piso de 551 metros cuadrados situado en el piso 60 del número 220 de la Central Park South; mientras que para adquirir la vivienda del piso superior ha invertido otros, nada despreciables, 75 millones de dólares. Una compra que lleva a pensar que el ahora misterioso dueño va a contar con un lujoso dúplex situado en uno de los enclaves más caros del mundo.

Según los expertos inmobiliarios de la zona, esta venta ha superado todo los récords conocidos hasta ahora, ya que el año pasado una vivienda similar del piso 61 fue vendida por 51,4 millones de dólares, mientras que el precio del piso de la planta inferior, de las mismas características, disminuyó hasta los 50,9 millones. Eso si no nos fijamos en los áticos, que es donde se encuentra el lujo entre los lujos. Ya que el Billionaires’ Row ostenta en estos momentos la venta más cara de todo Estados Unidos, desde que en 2019 el inversor Ken Griffin se hiciese con uno de los privilegiados áticos por una suma aproximada de 238 millones de dólares.

Todo un oasis del lujo situado en apenas unos pocos kilómetros de uno de los rincones más exclusivos de una de las ciudades más caras del mundo. Un mundo en el que solo unos pocos privilegiados pueden moverse como peces en el agua. Por algo se le conoce como la “avenida de los multimillonarios”.