Callejón sin salida

La vicepresidenta de Gobierno descarta una reunión entre Mas y Rajoy acusando al president de estar «en un callejón sin salida». Descartando el encuentro, Sáenz de Santamaría le dice a Mas que no espere ayuda para salir del atolladero. Raudo y veloz, Francesc Homs, el portavoz del Govern, ha contestado criticando la actitud negativa de Rajoy aunque ha augurado que cambiará de actitud porque «es el primer interesado en salir del callejón sin salida».

La conclusión de este cruce de navajas florentino es que los dos gobiernos constatan que estamos en un callejón sin salida. Por si fuera poco, Duran i Lleida, el jefe de filas de CiU en Madrid, también ve la situación en un callejón, pero con una salida: la convocatoria de elecciones anticipadas. Plebiscitarias, claro. Eso significaría, entre otras cosas, que Mas podría convocar unas elecciones para perderlas en favor de ERC y que su propia convocatoria significaría la ruptura de CiU, porque nadie puede pensar que los democristianos se presentarán a unas elecciones apoyando la independencia. Asimismo, la ruptura de la federación llevaría implícita la ruptura de Unió tal y como hoy apuntaba, con pocos paños calientes, su presidente, Josep Antoni Duran i Lleida.

Rajoy y Mas llevan meses velando armas y azuzando a sus huestes contra el adversario. Después de meses y meses de «palo y tentetieso» parece que se agotan las ideas. Y se concluye: Estamos en un callejón sin salida, y las salidas –pocas–, que se vislumbran son para echarse a temblar. Ahora sólo falta tocar de pies en el suelo. No es tarea fácil.

Sin embargo, cada día son más las voces que claman por sentarse a hablar –que no negociar–, para buscar esa luz al final del túnel. Las grandes empresas catalanas y la patronal Fomento llevan meses alertando que con testosterona no se arreglan los conflictos. El presidente de la CEOE, Juan Rosell, hombre comedido en sus palabras, ha calificado la independencia como un destrozo «en las relaciones humanas y económicas». Y lo más sobresaliente, la asociación de directivos y empresarios de habla alemana ha presentado un documento alertando sobre las veleidades independentistas y sobre los peligros de quedarse fuera de la UE. Todo un aviso a navegantes. Quedarse fuera de la UE deja en el alero las inversiones en Cataluña. Como toda respuesta, Oriol Junqueras, el líder de ERC, ha afirmado que la UE no dejará fuera a Cataluña. No creo que los alemanes se hayan quedado tranquilos ante tamaña majadería. ¡Y el que da esta respuesta puede ganar las elecciones! Apaga y vámonos. El callejón no tiene salida.