Romper España

L21 Fe y sol

Los periódicos están llenos hoy de Gasol y oro, el oro de la selección española de baloncesto.

–España –me traslada Hernán San Pedro– tiene dos soles: el del cielo, que es el sol del sustancioso turismo además; y el del deporte, que es el otro sol que brilla más que el sol de Jueves Santo.

Hernán es hombre de fe, como Reyes. Reyes, otro grande, otro exquisito del baloncesto, opina que el triunfo de España en el Europeo ha sido «el triunfo de la fe». Los hombres, en efecto «cuando tienen fe, son capaces de obrar milagros», que dijo un teólogo aficionado al deporte. Gasol y Nadal, desde ya, se merecen el «Sir» de España, que no sé cuál es.

–Marqués, oiga.

–El de marqués es título que huele a rancio, a cosa casi medieval. Del Bosque, tan inteligente, no presume absolutamente nada de su marquesado.

–Una vez –me recuerdan– pediste a Don Juan Carlos, hoy rey emérito, el Toisón de Oro para Nadal .

–Petición– le respondo– que le entró por un oído y le salió por el otro. Felipe VI se apuntaría «soleado oro de acierto y popularidad» si dejase de pensar que el Toisón debe ser distinción para políticos.

Repito otra vez mi frase predilecta: une en España el deporte lo que la política desune o resquebraja.

El sol de España y el sol del deporte, ¡qué dos soles!

M22 Romper

«Si se rompe España, se rompe la Liga». Grito de alarma de Javier Tebas, amo y señor de la Liga de Fútbol Profesional.

-¡Si sólo fuese la Liga...!

Vivo la voz de la calle. Pienso a veces, y creo que con acierto, que los políticos pisan más el asfalto de Babia que el de la calle.

–Si cuando «Arturito»– me reflexiona con cachondeo el conductor de un autobús– empezó a jugar con el balón de la secesión, su madre la Constitución le hubiera soltado un buen cachetazo en el coco y le hubiera dicho: «Arturito, ese balón es caca, que no te vuelva a ver jugando con él», hoy no estaríamos acollonados con la caca de la secesión de Arturito.

¡A Arturito y a su caca, la penicilina de la Constitución y sanseacabó! ¡Ésta es la solución!

Le tranquilizo:

–Ya lo dijo Churchill: el hacer y el pasar, vale– relativamente- como norma económica. Como norma política es nefasta.

Me fío de mi intuición. Como dice Iker Casillas desde que está jugando en el Oporto, «tranquilidad». Yo sigo creyendo en la Constitución. Pues si se rompe España, lo digo como lo siento: a la «mierda» la democracia que tenemos, pues no es democracia constitucionalmente hablando. Es otro «invento».

J24 Carácter

El carácter es la energía de la voluntad; y en San Mamés, el Athletic y el Real Madrid ofrecieron una bonita pugna de voluntad y carácter. En la Liga de esta temporada, y eso es sanísimo para el fútbol, hay afortunadamente equipos de carácter. Ahí está, sorprendiendo, el Celta, el Villarreal, el Eibar y otros, jugando todos «fútbol asociación» con gracia, con talento, con capacidad de descaro. Berizzo, el entrenador argentino de los vigueses, tras el insólito guantazo en forma de 4-1 al Barça, en lugar de celebrar jacarandosamente el sopapo, ha dicho sencillamente: «Hoy hemos honrado al fútbol». Carácter y honradez. Qué estupendo matrimonio.

–¿Has leído, por cierto,– me preguntan–, el soplamocos de Felipe González a Artur Mas, llamándole fracasado y comparándolo con el déspota y cara dura venezolano Maduro?

–Lo he leído. Con fruición. Lo cual que se mire en él el ambiguo y difuso Pedro Sánchez (prefiero mil veces a Susana Díaz: es leal a España sin dobleces). Y que aprendan también de él todos los políticos que a la gente hay que hablarle claro y sin cataplasmas federalistas. Lo que la gente quiere, en síntesis democrática, es ser gobernada por gente de Estado. Por estadistas..

V25 Igualdad

Cisnes y patos pertenecen a la misma familia, pero el pato siempre será el cisne feo de la familia. Según la Biblia, Dios nos hizo a todos a su imagen y semejanza; si fuese verdad, todas las mujeres serían guapas o feas y todos los hombre serían altos o bajos. No es así.

–Ante la ley –me recuerda mi otro yo– todos somos iguales.

–Tampoco. Hay «presuntos» que sin ser juzgados entran en la cárcel y hay «presuntos» como ese famoso clan catalán tan amigo de Artur Mas que, a buen seguro, jamás pisará la cárcel.

¿Por qué expongo esto? Por la distribución de los derechos audiovisuales del fútbol. Tebas quiere centralizarlos (igualarlos), Florentino, no. Los dos, si bien se mira, tienen razón. La vida jamás dejará de ser una cosa de cisnes y patos.