España en Verano: La dieta Damon

Dejando atrás su aventura neoyorquina, Matt Damon regresa a California para vivir cerca de su amigo Ben Affleck. Desea comenzar una vida nueva y el actor se prepara para rodar su primera película como director. Mientras, Damon estrena su nuevo filme como actor, «Elysium», una historia de ciencia ficción que en realidad se trata de una denuncia social sobre la diferencia insalvable que existe entre ricos y pobres. Protagonizada por Matt Damon y Jodie Foster, está realizada por Neill Blomkamp, el mismo de la alabada «Distrito nueve». En Los Ángeles tuvimos oportunidad de hablar con Damon sobre «Elysium» y los pormenores de su carrera.

-Sin duda, esta película pone de relieve las diferencias económicas entre clases.

-Este filme, ante todo, es puro entretenimiento. Desde luego el contenido tiene su relevancia. La ciencia ficción y el gore al que es tan aficionado el director se expresan de una forma muy distinta en la historia.

-Su personaje quiere ir a toda costa a Elysium. ¿Posee esa misma determinación?

-Mi personaje desea ir a la estación espacial porque se está muriendo y necesita curarse. Los ricos tienen acceso a otro tipo de cuidados médicos. Es la desesperación lo que le mueve.

-¿Qué le atrajo del filme?

-Vi «Distrito nueve» y aluciné. Me parece una película perfecta y cuando Neill me ofreció leer el guión de «Elysium» le dije que contara conmigo aun antes de terminarlo. Estaba deseando trabajar con Blomkamp.

-¿Alguna vez pensó que terminaría convirtiéndose en un héroe de acción?

-Jamás he tenido mucho interés en interpretar a uno, no soy un gran fan de las películas de ese género porque normalmente no son lo suficientemente inteligentes ni consiguen integrar la acción con la historia, lo único que muestran es una explosión tras otra. Pero disfruté con el guión porque supera los límites de esa fórmula.

-¿Cómo se enfrenta a sus personajes?

-Reconozco que poseo una ética de trabajo muy estricta, que me gusta trabajar duro, pero también entiendo que tengo una familia a quien me debo y me gusta encontrar el equilibrio entremi trabajo y lo que me entrego como actor y el tiempo que quiero dedicar a mi mujer y a mis hijas.

-¿Sigue siendo Ben Affleck su mejor amigo?

-Nuestra amistad se ha convertido en toda una experiencia, recuerdo que cuando rodamos «El indomable Will Hunting» aparecieron en escena algunos ejecutivos de Hollywood que me comentaron que nuestra historia como amigos desde la infancia era lo más increíble que había oído en la industria del cine en toda su vida. Les sorprendía que fuéramos amigos de la infancia y nos ayudáramos en nuestros proyectos, algo que para el resto es lo más normal en este mundo resulta extraño. Yo creo que lo difícil en Hollywood es no volverse loco

-Matt, usted es de los pocos intérpretes que jamás provocan un escándalo, ¿qué le mantiene con los pies en el suelo?

-Le pago a mucha gente para que me critiquen diariamente y no se me suba nada (se ríe). Creo que he tenido suerte en mi vida porque me he enamorado de una mujer que no trabaja en la industria del entretenimiento y ella me mantiene relacionado con la realidad. En Hollywood existe una voracidad enorme por alimentar el ego saliendo en las revistas de los paparazzi. Lo que vende es el sexo y el escándalo. A mí no me interesa nada de eso.

-¿Se ha arrepentido de alguna película que no realizó?

-Yo soy el actor que pasó de hacer «Avatar», imagínate si me he arrepentido. Lo cierto es que no podía estar tanto tiempo en Nueva Zelanda, me hubiera encantado ponerme a las órdenes de un visionario como James Cameron, pero estaba comprometido. También tuve que pasar de hacer «El luchador» y el actor adecuado consiguió el papel, estaba en el destino de Christian Bale.

-Entonces, si cree en el destino...

-A mí me parece que en ocasiones la fortuna se encuentra de nuestro lado, pero en otras, las decisiones que tomamos son las que influyen en tu vida. Quiero pensar que elegimos lo que nos ocurre, aunque a veces la suerte juegue su papel.

-¿Vive pensando siempre en el futuro?

-Sí, claro, como todo el mundo, lo que no quiere decir que haya visto el futuro. Yo trabajo disfrutando el presente, sé que no es fácil, pero siento que toda mi vida he estado mirando hacia el futuro programando películas, y ahora voy más despacio. Porque la vida va demasiado rápido. El futuro me provoca curiosidad, ahora mismo es un cheque en blanco porque lo que en realidad quiero es estar con mi familia. Cuando escucho las noticias me deprimo.

-Sin duda, no está padeciendo ninguna crisis a pesar de los cuarenta.

-De adolescente me di cuenta de que no iba para atleta profesional, así que dejé de preocuparme por la edad. Ahora que acabo de cumplir cuarenta, pienso un poco más en lo que me queda por vivir. Soy un hombre que ha tenido mucha suerte, he vivido cosas maravillosas, tengo una carrera de la que no puedo quejarme, una familia maravillosa, tenemos salud, hago lo que me gusta. Estoy agradecido desde el momento que me levanto de la cama. No tengo razones para deprimirme.