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La Generalitat cree que el conflicto judicial por ATLL no afectará al déficit

La Generalitat considera que el conflicto judicial entre Agbar y Acciona por la adjudicación de la empresa pública Aigües Ter-Llobregat no afectará al déficit de la Generalitat para 2012, que fue del 2,3 % del PIB, según cálculos de la Generalitat, ocho décimas por encima de lo permitido.

El presidente catalán, Artur Mas, y el conseller de Economía, Andreu Mas-Colell, han defendido hoy de nuevo la adjudicación de la empresa Aigües Ter-Llobregat a Acciona y han argumentado que no ven en peligro los ingresos obtenidos en esta operación, que han servido para recortar en medio punto porcentual el déficit de 2012.

En rueda de prensa, ambos dirigentes se han referido así a la adjudicación de la empresa pública ATLL, que ha abierto una batalla legal entre Acciona y Agbar que dirimirán los tribunales.

El gobierno catalán asegura que cuenta con la autorización de la Intervención General del Estado para poder computar los 1.000 millones por la privatización de ATLL (unos 300 ya abonados por Acciona y sus socios, y los 700 restantes a lo largo de los próximos 50 años) a cuenta del déficit de 2012.

Ese recurso contable ha permitido a la Generalitat que pudiera rebajar su déficit para 2012 en aproximadamente medio punto del PIB, y aunque el conflicto de ATLL está ahora en manos del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, Mas-Colell ha comentado que confía en que esos 1.000 millones seguirán pudiendo computar para el déficit de 2012.

"Se ha vendido cuando se tenía que vender y cuentan como ingresos del año pasado, como se acordó con la IGAE"(Intervención General de la Administración del Estado), ha afirmado Mas-Colell, que ha remarcado que la adjudicación de ATLL fue "jurídica y contractualmente sólida".

Por su parte, tanto Mas como Mas-Colell han defendido que el proceso de privatización ha contado con una total "garantía de transparencia"y han restado importancia a que el Órgano de Recursos Contractuales de Cataluña dictaminara en contra del criterio de la propia Generalitat.

"Volverá a pasar en el futuro", ha dicho Mas-Colell, que ha lamentado que a nadie le sorprenda que el Gobierno español recurra una decisión de un organismo regulador independiente.