Cuatro asesinatos por violencia machista en apenas ocho horas

En Castellón un hombre acuchilló a sus dos hijas de 2 y 6 años. En Bilbao y Granada dos mujeres fallecieron a manos de sus parejas.

Dos mujeres muertas a manos de sus parejas o ex parejas y dos niñas asesinadas por su padre. Es el trágico balance de la negra jornada de violencia machista de ayer, que deja un saldo de 37 mujeres y tres menores fallecidas por violencia de género en lo que va de año.

Todo comenzó en Castellón, donde un hombre acabó a cuchilladas con la vida de sus dos hijas, de 2 y 6 años para después suicidarse. Fue a las 5:30 horas cuando varios vecinos alertaron a la Policía de que un hombre había saltado desde un sexto piso. Al llegar al lugar y subir a su domicilio, los agentes encontraron los cuerpos sin vida de las dos pequeñas, Martina y Nerea. Se da la circunstancia de que el padre había tenido dos causas abiertas en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer por malos tratos y amenazas a su ex pareja, dos procedimientos que se sobreseyeron en enero y febrero, a petición del fiscal y de la propia víctima. La mujer había solicitado una orden de alejamiento pero el fiscal no consideró necesaria la adopción de medidas cautelares y se opuso a la concesión del alejamiento.

Según el relato de un vecino, el parricida, que estaba en paro, le relató el pasado sábado que estaba «muy agobiado», pues el juez, a instancias de su ex mujer, le había embargado las cuentas por estar desde febrero ingresando sólo 200 de los 400 euros de pensión de manutención en la cuenta de la madre de las menores, informa L. L. Álvarez. La ex pareja, de nombre Itziar Prats, psicóloga, reside en un bloque de viviendas situado frente al piso donde residía el presunto autor del doble crimen y los servicios sanitarios la trasladaron junto a la abuela a un centro hospitalario para recibir atención psicológica.

Apenas cinco horas después, un nuevo asesinato conmocionaba a la localidad granadina de Maracena. A las 10:20 horas, en el barrio de Villasol, un hombre de 49 años acabó presuntamente a puñaladas con la vida de su ex pareja, de 39, con la que tenía un hijo de 12 años. Fue la propia víctima la que alertó al 061, aunque cuando llegaron los efectivos la encontraron sin vida en medio de un charco de sangre. Allí también estaba el hombre, que fue detenido. La víctima, la quinta asesinada por su pareja o ex pareja en la provincia de Granada este año, convivía con el arrestado en el barrio de Villasol de la localidad.

Según confirmó el padre de Nuria, la mujer asesinada, muy querida y conocida en este municipio del área metropolitana de Granada, el lunes había recibido la sentencia sobre el acuerdo de separación alcanzado por ambos en un proceso que ya duraba dos años. Tal y como indicó, en todo este tiempo su hija sufrió maltrato, especialmente psicológico, aunque a la Guardia Civil no le constan denuncias previas por violencia de género entre la pareja y la víctima tampoco era usuaria del centro municipal de atención a la mujer.

El alcalde de Maracena, Noel López, recalcó que el municipio afronta «consternado» el primero de los tres días de luto por esta «desgracia» y subrayó el rechazo más absoluto a cualquier violencia machista. Representantes municipales, vecinos y conocidos de Nuria, la mujer fallecida, guardaron un minuto de silencio para condenar un nuevo episodio de violencia machista.

Degollada ante sus hijas

El último caso tuvo lugar sobre las 13:30 horas en Bilbao. Tras la llamada de los vecinos, varios agentes se desplazaron hasta su domicilio de la calle Ollerías, donde se encontraron el cadáver de una joven de origen africano que había muerto degollada. Según los investigadores, fue acuchillada por su pareja en presencia de las dos hijas, que tienen menos de cinco años. A última hora de la tarde, el presunto asesino –un inmigrante sin papeles– fue arrestado en la localidad guipuzcoana de Mutriku, a unos 70 kilómetros.

Nada más conocerse los asesinatos, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la vicepresidenta, Carmen Calvo, mostraron su apoyo y cariño a los familiares de las dos últimas víctimas de la violencia machista y de las dos niñas que murieron a manos de su padre. El Rey Felipe VI, por su parte, mostró su «repulsa y condena» por los asesinatos y trasladó también su cariño y solidaridad a la familia de las dos niñas fallecidas por esa «muerte tan terrible».