Reforma educativa

Becas de 8.000 euros para alumnos sin recursos y brillantes

En el caso de primero de Bachillerato y de FP superior, los alumnos deberán haber obtenido una media de 5,5. EFE/Andreu Dalmau.
En el caso de primero de Bachillerato y de FP superior, los alumnos deberán haber obtenido una media de 5,5. EFE/Andreu Dalmau.larazon

A menor renta y mejores notas mayor beca. Es la fórmula por la que apuesta el ministro de Educación en el Real Decreto que fija las becas y ayudas al estudio para el curso académico 2013-2014 que fue aprobado ayer por el Consejo de Ministros. Hasta el punto de que un universitario podría llegar a recibir incluso más de 8.000 euros al año y matrícula gratuita si sus calificaciones son muy buenas y su renta familiar baja, según informaron fuentes consultadas de Educación.

El nuevo sistema de concesión de becas contará con una parte fija y otra variable de 60 euros como mínimo que se calculará según su renta y rendimiento, de ahí que un alumno no sepa, a priori, qué cantidad exacta de beca va a recibir.

Pero si hay algo que garantizará esta nueva fórmula es que el Ministerio de Educación no se gaste en becas más de lo que tiene presupuestado cada año ya que, por el aumento progresivo de beneficiarios, el Ministerio ve comprometido cada año más de la mitad de su presupuesto para afrontar los pagos de becas del ejercicio anterior.

Crecimiento presupuestario

Muestra de ese aumento progresivo de las ayudas se aprecia en los presupuestos. Si en 2006 la asignación para becas generales era de 657 millones, en 2013 ha sido de 1.161 millones. De hecho, se calcula que la partida de becas ha sido una de las que más ha crecido en los últimos años en la Administración General del Estado junto con la prestación por desempleo.

La nota mínima tanto para obtener una beca en Bachillerato como para conseguir que las tasas universitarias salgan gratis al alumno será un 5,5. Es lo que el ministro de Educación, José Ignacio Wert, considera «pagar los estudios». Para hacernos una idea, todos los alumnos con una renta de 38.831 euros para una familia de cuatro miembros tendrá derecho a beca. Como mínimo, recibirá la exención de tasas de matrícula (equivalente a 2.000 euros de media) o la beca básica de 200 euros.

Para recibir los 8.000 euros de ayuda, o más, las llamadas becas compensatorias o de residencia por el traslado del alumno para estudiar a otra comunidad autónoma diferente a la que reside, los estudiantes tendrán que tener al menos un 6,5 en la nota de acceso en la universidad. Y para mantener la cuantía en cursos superiores será necesario superar el 85% de las asignaturas o el 65% y tener un 6 de media en el caso de las enseñanzas técnicas; aprobar el cien por cien o el 80% más un 6 de media para los cursos de ciencias; los mismos requisitos y un 6,5 para Ciencias de la Salud; y aprobar todas las asignaturas o el 90% más un 6,5 de media para mantener las ayudas en Ciencias Sociales, Jurídicas y Artes y Humanidades.

Condiciones

El Real Decreto aprobado ayer suaviza las condiciones que estaba previsto exigir para el próximo curso académico que ya venían marcadas en el decreto de becas del año pasado, en el que se pedía un 6,5 de media para todas las becas. El ministro de Educación accedió a rebajar la exigencia al 5,5 después de escuchar a la Conferencia General de Política Universitaria, el Consejo General de Universidades y el de estudiantes, además del Consejo Escolar del Estado. «Hemos atendido a un argumento razonable y es que un requisito de acceso no impida acceder a la universidad por falta de recursos, pero para el disfrute completo del sistema seguiremos manteniendo la nota más alta», dijo Wert recientemente.

A los alumnos que se encuentren estudiando un máster se les pedirá, tanto para el primero como para el segundo curso, un 7 y un 6,50, dependiendo de si se tratan de másteres que habilitan para el ejercicio de una profesión regulada. En el segundo curso se exigirá, además, haber superado todos los créditos del primero.

Las ayudas al estudio del Ministerio de Educación también alcanzan a las enseñanzas no universitarias, concretamente a la FP y al Bachillerato, pero deberán reunir determinados requisitos. Así, los alumnos de primer curso de Bachillerato deberán haber obtenido una nota media de 5,5 en la ESO. Los de Formación Profesional de Grado Superior deberán haber conseguido una media de 5,5 en Bachillerato, mientras que a los de grado medio se les exigirá estar matriculados. Para los segundos cursos se les exigirá superar todas las materias, excepto una o superar el 85% de las horas totales en el supuesto de enseñanzas que se organicen por módulos.

El decreto de becas aprobado por el Gobierno sigue generando polémica. La vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, ayer manifestó que «el Gobierno pretende que las personas con menos recursos se tengan que esforzar mucho más que los ricos para poder seguir estudiando».

La número dos del PSOE ha expresado así la oposición de su partido al decreto de becas aprobado en el Consejo de Ministros, por cuanto supone, en su opinión, «un ataque frontal a la igualdad de oportunidades y al derecho a aprender de quienes menos tienen» con el establecimiento de los nuevos umbrales para tener derecho a estas ayudas públicas.«Con esta decisión, el Gobierno limita el derecho a aprender de los que menos recursos tienen. La nota para tener una beca se lo pondrá todavía más fácil a los ricos y más difícil a todos los demás. Es una política clasista y poco inteligente», denunció.

Los rectores también han expresado sus reticencias al real decreto, ya que consideran que aumentar la nota mínima de Selectividad para poder optar a las becas generales perjudicará en gran medida a los estudiantes de rentas más bajas, pues parte de ellos no podrán seguir estudiando. «Ahí se puede producir un fallo enorme en la igualdad de oportunidades porque haya muchos que se queden excluidos», manifestó a Efe la presidenta de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), Adelaida de la Calle.

Algunos expertos consideran, sin embargo, que la nota de acceso a las becas debería haberse mantenido en el 6,5 para todas las situaciones. Es el caso de Ramón Tamames, catedrático de Estructura Económica, para quien «el dinero público exige un mínimo de compromiso y de calidad y realmente incluso el 6,5 no es ni notable y si damos becas a los meramente aprobados vamos a ir listos. Vamos para atrás como los cangrejos».