El juez ve indicios de abuso sexual e imputa a la mujer de El Chicle

El juez le tomará hoy declaración tras tres días en prisión. Su defensa alegará atropello involuntario, mientras la acusación particular espera que confiese. Su esposa Rosario declarará como posible cómplice de la muerte de Diana Quer.

El titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Ribeira escuchará hoy a José Enrique Abuín Gey, alias El Chicle. Según informó ayer el Tribunal Superior de Justicia, está previsto que el acusado de la muerte de Diana Quer, declare hoy acompañado por su abogado, el letrado Ramón Sierra. Aunque podrá acogerse a su derecho a no declarar, tal y como lo hizo la vez anterior ante la jueza de guardia del Juzgado de Instrucción número 3 de Ribeira por recomendación de su defensa.

Esta segunda toma de declaración se debe a que el juez acordó ayer en un auto la reapertura de las actuaciones seguidas por la desaparición de Diana Quer. En el mismo, el magistrado también señala a la mujer de El Chicle, Rosario Rodríguez, como investigada al afirmar que «no pudiendo ser descartada en el momento actual la participación en los actos de su esposa, resultando por tanto ambos investigados en la presente causa». Además, el juez decidió la incorporación a la causa de los antecedentes penales de Rosario. Y se acuerda también la declaración en calidad de testigos de dos personas, de las que se desconoce su identidad.

Tras recordar los motivos por los que hubo que proceder a archivar la causa, «al no poder ser dirigida la misma frente a persona alguna determinada», el magistrado explica que a raíz de las últimas investigaciones policiales practicadas «se desprende la existencia de nuevos elementos fácticos que corroboran los indicios anteriormente existentes respecto a la posible comisión de un delito de detención ilegal, existiendo asimismo indicios de la comisión de un delito de homicidio o asesinato, al haber sido hallado un cadáver que correspondería a la persona desaparecida». Además, el juez apunta a un delito sexual, al añadir que «existen igualmente indicios respecto a la posible comisión frente a la misma de delitos contra su libertad sexual».

La comparecencia de los investigados comenzará hoy a las 11:00 de la mañana. El Chicle, al encontrarse en prisión provisional, será trasladado en un furgón desde el Centro Penitenciario de Teixeiro hasta Ribeira. Ayer, continuaba en el módulo de ingresos, separado del resto de internos y con el único contacto del funcionario que le llevaba el desayuno, la comida y la cena a su celda.

Quizá este aislamiento decretado por la jueza de guardia y la actitud de sus familiares, que le conminan a decir toda la verdad, le motive a declarar. Aunque no será a priori por recomendación de su abogado. En cuanto al papel de Rosario, el abogado de la madre de Diana Quer, Pedro Víctor Bernardo, se mostró prudente: «No sé cuál ha sido el papel de la mujer de El Chicle, habrá que ver que declara», afirmó a este periódo. El letrado también prefiere esperar a lo que diga la autopsia antes de explicar cuál será su línea argumental y afirmó que su cliente, Diana López Pinel «se encuentra en su casa en Madrid, muy mal».

Y mientras el proceso judicial sigue su curso, los vecinos de la zona de Rianxo continúan en shock. Los alrededores de la nave industrial abandonada en Asados, donde se encontró sin vida el cuerpo de la joven madrileña, se ha convertido en un improvisado altar donde muchas personas de los pueblos cercanos depositan girasoles, rosas y siemprevivas. Otros se acercan a depositar velas, algunas de las cuales se mantienen encendidas a pesar de la lluvia que no ha dejado de caer sobre el edificio, ahora precintado por la Guardia Civil, y al que no se permite el acceso desde que el cuerpo fue retirado. Junto a una de las velas depositadas se puede leer la siguiente inscripción: «Te arrebataron la vida y los sueños, pero tu recuerdo siempre permanecerá. Todas somos Diana. Ni una menos, terrorismo machista. Asados, Rianxo y Galicia lloran. Nosotras lucharemos por ti. Justicia. Descansa en Paz, Diana». «Jamás pensé que pudiera estar allí Diana Quer», relata un vecino que tiene un terreno próximo a la nave . «Fíjense, la valla es nueva. Hace seis meses o así la vaciaron porque tenía aún muebles, y es cuando la vallaron». Es decir, cuando ya estaba el cuerpo de Diana Quer. «Es una casualidad, pero allí dentro no pudieron ver nada. Porque la nave está compuesta por una planta de arriba, que era donde estaban las oficinas, la planta baja, donde estaban los muebles y el sótano, que fue donde El Chicle arrojó a la joven», detalla. Lo increíble es que este espacio se puso a la venta, por un valor de 283.500 euros, y algunos clientes entraron interesandose por el edifico, desconociendo totalmente el cadáver que contenía.

A pocos kilómetros de allí, en la Casa Consistorial, las banderas ondeaban a media asta en señal de luto. La teniente de alcalde, Adelina Ces, pidió a la multitud de medios congregados que respeten la intimidad y la tranquilidad de la familia de Abuín y explicó que la corporación dispondrá un psicólogo para facilitar la vuelta al entorno escolar de la hija de El Chicle y Rosario Rodríguez.

Lo cierto es que sus parientes están sufriendo las consecuencias de sus actos. Los insultos son constantes en sus perfiles de las redes sociales, aunque se afanen en recordar que ellos no han tenido nada que ver y que, de hecho, repudian al presunto autor de la muerte de Diana. El más contundente ha sido un sobrino de El Chicle, que compartió hace dos días un enlace de Change.org para que haya pena de muerte en España para violadores y asesinos con la foto de su tío. Entre los vecinos, las opiniones son bien diferentes. Algunos aseguran que tanto los padres como los hermanos están sufriendo y otros, que «en general se trata de una familia agresiva».