Barcelona

¿Por qué es importante conocer cómo se forman las nubes?

Tienen un papel fundamental en el enfriamiento del planeta, pero apenas se tienen detalles sobre su formación, su composición o las características de su espesor.

En la actualidad, las nubes tienen un papel fundamental en el enfriamiento del planeta, pero para saber si esa función continuará en el futuro es preciso conocer cómo se forman, una materia sobre la que hay gran desconocimiento y en la que profundizará el equipo científico que parte hoy hacia la Antártida a bordo del Hespérides.

Hasta el próximo 12 de febrero, ese Buque de Investigación Oceanográfica (BIO) de la Armada será la base de operaciones de un equipo formado por dos grupos de investigadores (expertos en oceanografía y en atmósfera), cuyo trabajo conjunto es una de las novedades del proyecto, denominado “Pegaso”.

Su coordinador, Rafael Simó, del Instituto de Ciencias del Mar del CSIC en Barcelona, ha explicado a EFE que existe un gran desconocimiento sobre la manera en la que la naturaleza influye en las variaciones del clima, lo que dificulta en gran medida poder establecer previsiones, por ejemplo, sobre el cambio climático y el calentamiento global.

“Conocemos que el calentamiento global se debe sobre todo a las emisiones de dióxido de carbono (CO2), y los humanos son grandes emisores, así que la comunidad científica conoce muy bien el impacto de los humanos en el cambio climático. Pero hay otros aspectos, los que dependen de la naturaleza, sobre los que hay gran incertidumbre”, ha explicado.

Es el caso de las nubes, de las que apenas se tienen detalles sobre su formación, su composición (más allá del vapor de agua), o las características de su espesor.

Se sabe, por ejemplo, que para que las nubes se formen, es necesario la emisión de partículas, y de nuevo están estudiadas las que emiten los humanos, pero se desconoce en buena medida las que produce la naturaleza, y el desconocimiento es casi total en cuanto a las que produce el mar.

Durante este viaje en el Hespérides, unos 30 científicos investigarán el plancton (microorganismos que hay en el mar) en un área muy poco influida por la acción del hombre, para tratar de arrojar luz sobre su influencia en la creación de las nubes, ha explicado Simó.

Esos estudios serán determinantes para la elaboración de modelos de previsiones sobre el cambio climático y el papel que juega en él la naturaleza, ha agregado.

El motivo de centrar los estudios en las nubes, ha subrayado, se debe a que estas son en la actualidad el principal agente enfriante del planeta ya que durante el día reflejan las radiaciones solares y protegen de ellas.

Sin embargo, durante la noche las nubes hacen también una función calentadora, por lo que el reto de la comunidad científica es el de averiguar si en un futuro esa función será la predominante, al contrario de lo que ocurre actualmente, y para conocerlo, es necesario investigar cómo se forman y porqué.

Para llevar a cabo esta campaña, en la que colaboran instituciones de Irlanda, Reino Unido, Italia, Alemania, Argentina, Finlandia y Estados Unidos, se emplearán diversos equipos e instrumentales científicos de última generación que por primera vez se embarcarán juntos.

Por ello, ha indicado Simó, se trata de una investigación piloto, pero a la vez “definitiva”, ya que es difícil que se repitan las condiciones para poder llevar a cabo una campaña similar.

El grueso de los trabajos se desarrollará en la Antártida del 2 de enero al 12 de febrero, aunque hoy han embarcado ya en el Hespérides 7 científicos que llevarán a cabo mediciones en el Atlántico durante la travesía.

Durante los próximos meses, ha concluido Simó, los científicos mirarán hacia los seres más pequeños de la biosfera, el plancton que habita en el mar, para poder comprender mejor lo que ocurre en el cielo”.