Las pruebas perdidas en el cuerpo de Morate

Las autoridades españolas pidieron un chequeo por si tuviera algún signo de lucha. Los 21 días desde el crimen juegan en contra, pero la Policía confía en hallar rastros

Han transcurrido 13 días desde que Sergio Morate, el presunto asesino de las dos jóvenes de Cuenca, fue detenido y 21 días desde que tuvieron lugar los hechos. Un tiempo a priori excesivamente prolongado para obtener restos en su cuerpo que le inculpen. Sin embargo, las autoridades españolas no pierden el ánimo y ayer, como afirmó la abogada de Morate desde Rumanía, se le hizo el chequeo médico.

«El objetivo del reconocimiento médico solicitado el pasado viernes por las autoridades españolas, así como una revisión ocular del coche en Rumanía y estar presente en la toma de declaración del amigo de Morate, es por si tuviera alguna lesión por causa efecto de los hechos ocurridos», afirmaron ayer desde la Policía Nacional.

En cualquier caso, insistieron en que no se trata de un chequeo médico al uso para saber cómo se encuentra el sujeto por su más que inminente extradición a España, y no descartan que todavía en el cuerpo de Morate se pudiera encontrar algún signo de lucha.

De modo que, aunque puede parecer tarde, muy tarde, para detectar arañazos, cardenales o mordiscos en su cuerpo, podría ser que las autopsias practicadas por la Policía Científica española a Laura del Hoyo y Marina Okarynska hayan revelado restos del presunto asesino, ya sean epiteliales en las uñas de las jóvenes o muestras encontradas en la boca. «Seguramente el tiempo juega en contra, ya que no es lo mismo analizar restos a la media hora de producirse los hechos que 20 días después. En este sentido, un cardenal en principio dura como mucho entre 20 y 25 días y un arañazo, según la profundidad del mismo, pero las dos paredes se cicatrizan a los 10 o 12 días. Pero a pesar del tiempo transcurrido, eso no es problema, lo importante es saber las lesiones que les hizo a las chicas», explica el criminólogo Salvador Ortega, uno de los pioneros de la Policía Científica de este país. Además, «lo más probable es que la Policía rumana tomase fotografías del detenido tras el arresto», añade.

Otras fuentes policiales consultadas se mostraron más negativas, ya que explicaron que «ha transcurrido mucho tiempo para que se traten de hallar pruebas forenses, porque si lo que se buscan son muestras defensivas de las jóvenes, este chequeo se le tenía que haber hecho antes». Es por ello que apuntan a que otra opción pudiera ser una revisión médica por si Morate estuviera enfermo y «la que cobra más fuerza es que fuera porque la extradición es inminente, con el fin de curarse en salud».

En este sentido se pronunció también el criminólogo Ricardo Magaz: «El tiempo corre en contra de la ciencia para detectar señales que se producen siempre que hay un intercambio de golpes o un forcejeo. Además de para buscar posibles pruebas que favorezcan la investigación, las revisiones médicas se realizan para confirmar que el detenido no tiene lesiones provocadas por la actuación policial en caso de que hubiera tenido que ser reducido, para controlar que no se haya autolesionado y en este caso, al tratarse de un asunto internacional, interesa para todas las partes saber que se encuentra bien».

No obstante, lo cierto es que hasta el sábado la abogada de Morate puede recurrir su extradición y no será hasta el martes cuando el juez resuelva si se extradita o no a Morate, por lo que como muy pronto el presunto asesino estaría en España la próxima semana y si no, la siguiente. Es decir, demasiado tiempo para que este chequeo sea para «curarse en salud» y evitar que el detenido no pueda alegar hipotéticos daños causados por las autoridades policiales.

Respecto a la investigación del vehículo utilizado por Morate durante su huida, y que ayer estaba precintado y tapado, ayer el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, aseguró que la Justicia rumana ha dado vía libre para que policías españoles se desplacen a Timisoara y puedan analizar el coche. Así lo reveló ayer el ministro en los pasillos del Congreso, donde ha indicado que esta decisión acerca aún más la extradición del presunto asesino a nuestro país, informó Europa Press.

Por otro lado, el ministro de Justicia, Rafael Catalá, hizo hincapié en que Sergio Morate «no debería tener cautela» de ser enjuiciado en España, en respuesta a las declaraciones de su abogada, que asegura que su cliente piensa que no hay garantías de imparcialidad. En este sentido, el ministro afirmó que ningún ciudadano español «debería tener la cautela de pensar que es mejor ser enjuiciado en un país extranjero», debido a que todos los elementos del sistema judicial «están a primer nivel en calidad de justicia».

Las señales defensivas

ARAÑAZOS

Los brazos son la parte del cuerpo más propensa a ser arañada cuando se produce un forcejeo.

HEMATOMAS

Cualquier parte del cuerpo es susceptible de presentar hematomas por el intercambio de golpes que suele producirse durante algunas muertes violentas, aunque el rostro y el torso reciben los mayores golpes.

SIGNOS DE MORDISCOS

Las señales dejadas por las piezas dentales de la víctima pueden llegar a causar heridas más duraderas en el cuerpo del agresor.

SANGRE

Limpiar la zona salpicada elimina fácilmente los restos de sangre, pero en el caso de que se haya arañado fuertemente a la víctima, bajo las uñas pueden localizarse pequeñas cantidades de sangre.

PIEL

Al igual que en el caso anterior, es frecuente que bajo las uñas del agresor se escondan restos de piel.

LESIONES

Según la intensidad del forcejeo o los golpes, las articulaciones pueden resultar afectadas y dar lugar a dolencias que, sin llegar a ser visibles en un chequeo médico rutinario, persisten durante cierto tiempo.

La dama de honor de la boda: «Marina se casó muy enamorada»

Los familiares de Marina Okarinska siguen atónitos los acontecimientos que se han ido sucediendo desde que ella y su amiga Laura desaparecieran. Rehúyen hablar con la Prensa y por eso, una de las dos damas de honor que asistió a la boda elude las preguntas de LA RAZÓN: «Sólo te puedo decir que Marina se casó muy enamorada. Los dos estaban muy felices». La boda se celebró apenas unos meses antes del trágico final de la joven a manos, presuntamente, de su ex pareja, Sergio Morate que, como barajan las investigaciones, pudo enterarse días antes del paso que había dado ella y pudo ser el desecadenante que determinó su agresión a las jóvenes.