Barcelona

Un niño de 6 años recibe un trasplante de corazón después de vivir un año con uno artificial

Unai, un niño de seis años que llevaba un año conectado a un corazón artificial en la UCI, ha superado con éxito un trasplante de corazón al que ha sido sometido en el Hospital Vall d'Hebron de Barcelona, uno de los centros más experimentados de España en trasplante cardíaco infantil. Según ha informado el Hospital Vall d'Hebron, que ha recibido la acreditación del Sistema Nacional de Salud como centro de referencia en trasplante cardíaco infantil, el niño, vecino de Alpicat (Lérida), fue diagnosticado de una miocardiopatía no compactada cuando tenía un mes de vida y los padres fueron advertidos por los médicos de que, tarde o temprano, le tendrían que someter a un trasplante de corazón.

A los cuatro años, la miocardiopatía le impedía andar, comer y le provocaba pérdidas de conocimiento frecuentes, hecho que obligó al pequeño a acudir a la unidad de cirugía cardíaca pediátrica del Hospital Vall d'Hebron, donde fue atendido por la cardióloga Dimpna Albert, y donde pasó los dos años siguientes de su vida ingresado en la unidad de cuidados intensivos (UCI). Unai fue inscrito en la lista de trasplante cardíaco en noviembre de 2009, pero como en aquel momento no había ningún donante que respondiera a sus necesidades y necesitaba un corazón para sobrevivir, los médicos decidieron colocarle un dispositivo de asistencia ventricular, tipo Berlin Heart, el 30 de noviembre de 2011.

El dispositivo de asistencia ventricular -una especie de corazón artificial- al que fue conectado Unai cuando tenía 4 años le salvó la vida, aunque lo retuvo un año en la UCI del hospital barcelonés. El área de trasplante de corazón infantil de este hospital, creada en 2006, utiliza este tipo de recurso cuando un paciente ingresa con el objetivo de recibir un corazón nuevo en unos días o unas semanas. En el caso de Unai, sin embargo, el Berlin Heart se convirtió en un compañero permanente para el menor durante doce meses, un año entero en el que el niño no pudo moverse de la cama, conectado permanentemente al aparato que le bombeaba la sangre.

Cuando Unai cumplió los cinco años, a finales del 2012, apareció un donante de corazón adecuado y el 4 de noviembre de ese mismo año el niño fue intervenido para trasplantarle su nuevo miocardio. Una vez realizado el trasplante, el cuerpo de Unai rechazó hasta cuatro veces el órgano implantado. Finalmente, después de un complicado proceso postoperatorio que obligó al pequeño a vivir un año más en la UCI del Hospital Vall d'Hebron, el cuerpo del niño aceptó su nuevo corazón. Fuentes del hospital han destacado que Unai no solo es el paciente pediátrico de España que más tiempo ha llevado un dispositivo de asistencia ventricular, sino que ha ido superando todas las complicaciones y ahora se está adaptando a su nuevo corazón y ya empieza a correr, tras ser dado de alta del hospital el pasado mes de julio.