Sólo en el 5% de casos de maltrato retiraron la custodia

Desde el cambio legislativo de verano los jueces pueden tomar medidas cautelares

Cincuenta y tres mujeres han muerto a manos de sus parejas en lo que va de año. Justo el mismo número que en 2014, a fecha de 16 de diciembre, sin contar con los tres casos que, como recoge el Ministerio de Sanidad, Asuntos Sociales e Igualdad, aún están en investigación. A pesar de que el número de mujeres asesinadas no baja, sí ha aumentado el número de condenas «por tercer trimestre consecutivo», destaca el Observatorio contra la violencia doméstica y de género del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). El porcentaje de condenas sobre el total de sentencias dictadas fue de un 64,1 por ciento. Es la misma cifra que en el mismo periodo del año anterior, pero de acuerdo con el órgano de los jueces, «consolida el incremento iniciado en el primer trimestre de este año».

En lo que se refiere a las denuncias, los juzgados españoles recibieron 33.705 denuncias en este mismo periodo, lo que supone un incremento interanual del 1,5 por ciento. Así, de acuerdo con el CGPJ, el número de mujeres víctimas de violencia de género se sitúa en 32.484, de las que el 31 por ciento son extranjeras. Este dato se incorporó en enero de este año, por lo que aún es pronto para determinar si el número de mujeres maltratadas se mantiene estable, aumenta o disminuye. Sólo se puede comparar con el primer y el segundo trimestre. Y es en los meses de julio, agosto y septiembre cuando la cifra es más elevada. Si se establece una comparación por comunidades autónomas, el número más elevado de víctimas de malos tratos se encuentra en Baleares, con una ratio de 24 por cada 10.000 mujeres, seguida de Canarias, con una ratio de 19,2. La media nacional se sitúa en 13,7. En lo que respecta a las denuncias, la mujer sigue siendo la que da el primer paso a la hora de afrontar su situación, por lo que en el 69 por ciento de los casos son ellas las que acuden directamente a los juzgados.

En lo que respecta a la protección del menor y las medidas civiles cautelares que se tomaron en los juzgados, un 22 por ciento de las adoptadas estaban relacionadas con la prestación de alimentos, mientras que sólo en un tres por ciento de los supuestos se procedió a la suspensión del regimen de visitas y en casi un cinco por ciento las medidas supusieron la suspensión de la guardia y custodia. «Es una cifra que se mantiene más o menos estable porque depende mucho de la gravedad del hecho y del peligro que el juez perciba que puede correr el menor», explica Javier Martínez Derqui, magistrado del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número siete de Madrid. El pasado verano el Gobierno reformó la legislación para limitar la guardia y custodia de forma cautelar en casos de violencia de género. «Lo que se busca es, sobre todo, velar por el interés superior del menor», apunta Martínez Derqui.

Otro de los datos nuevos que se incorporan este año es el que contabiliza el número de víctimas que se acogen a la dispensa de la obligación legal de declarar, que en el tercer trimestre de este año se coloca en un 13 por ciento en relación con el total de mujeres víctimas de violencia de género. Para los magistrados que actúan en estos casos, la renuncia a declarar contra su agresor supone un importante inconveniente a la hora de conseguir una sentencia condenatoria. «Si la mujer no declara nos quedamos sin la prueba más importante porque muchas de las agresiones se producen en la intimidad. Si ella no declara y no hay testigos, te quedas sin nada», afirma Martínez Derqui. El juez entiende que para las víctimas es muy difícil tener que hacer hasta tres declaraciones contra su pareja o expareja, pero «sin su declaración tampoco se les puede facilitar la protección necesaria». Por ello, desde los juzgados intentan explicarles la necesidad de que den de nuevo su testimonio. «En el 80 por ciento de los casos es la Policía la que me cuenta lo que la mujer testifica el día de la agresión, pero no es suficiente».

33 menores enjuiciados

Los juzgados especializados enjuiciaron a 33 menores de edad por delitos de violencia contra la mujer y se impusieron medidas en un 88% de los casos. Para la presidenta del Observatorio, Ángeles Carmona, los datos son la consolidación de la tendencia al alza que se observa desde principios de año en las condenas a los maltratadores, que demuestra que «no hay impunidad alguna y el Estado de Derecho funciona». Carmona advierte, por otra parte, de que las cifras alertan de que, aunque moderadamente, sigue creciendo el número de víctimas. «Nos preocupa que persistan todavía actitudes de violencia machista en nuestra sociedad, que no se acabe de dar un paso firme por familiares y amigos para denunciar y acompañar a la víctima en el proceso y que todavía se busquen justificaciones para lo que no es otra cosa que terrorismo de género».