España quiere liderar el futuro dron de combate ligero europeo, capaz de incorporar armamento

España trabaja en la creación de un consorcio de empresas nacionales que lidere el programa NGSR (Next Generation Small RPAS) para el desarrollo de un nuevo UAV táctico europeo armado de menos 150 kg.

El proyecto, coordinado por el Ejército de Tierra español, ya forma parte de las iniciativas de la Cooperación Estructurada Permanente (Pesco) de la Unión Europea. El programa fue lanzado en un principio por España, Alemania, Portugal, Eslovenia y Rumania, aunque también están interesados otros países como Francia, Austria, Países Bajos, Hungría, Grecia y Suecia.

El Ejército ha hecho un primer sondeo entre las empresas del sector y, por el momento, cinco compañías han mostrado interés en la iniciativa: Aertec, SCR, Wake Engineering, GMV y Tecnobit. El objetivo es poner en marcha a final de este año un consorcio, en forma de sociedad, que podría incluir a más empresas, “fiable y técnicamente solvente”, explican fuentes militares a Infodefensa.com.

Este consorcio español lideraría la iniciativa a nivel europeo y englobaría después en una segunda fase al resto de empresas del continente interesadas en el programa. Una vez creada la estructura empresarial, el gran reto es recibir financiación del Fondo Europeo de Defensa (EDF) de la Comisión. El calendario actual prevé presentar formalmente el proyecto el próximo año para aspirar a los fondos de la convocatoria de 2024. De forma paralela, a nivel nacional, el CDTI ha abierto la puerta a financiar el lanzamiento.

El programa contempla el diseño de una nueva generación de UAV Clase I de menos de 150 kg, con la opción de incorporar armamento, para su uso en unidades tipo brigada o división, y con posibilidad de empleo dual: civil y militar. La primera reunión de trabajo tuvo lugar el pasado mes de julio en Madrid con la presencia de representantes de los países interesados, la industria de defensa, la Agencia de Defensa Europea y el Estado Mayor de la Unión Europea.

Característica del UAV

El dron estará preparado para despegar, aterrizar y operar en un entorno táctico sin necesidad de una pista de aterrizaje y su diseño multifuncional proporcionará al operador un amplio repertorio de herramientas tanto para escenarios marítimos como aéreos. El alcance será de hasta 200 km y la autonomía de entre 5 y 10 horas.

En principio, el calendario inicial de la preparación y diseño del proyecto se extenderá hasta 2023. La segunda etapa, marcada por la integración de sistemas y las pruebas de interoperabilidad, será durante los años 2024 y 2025, y el primer prototipo está previsto que se entregue en 2026. El sistema contará con una arquitectura abierta, modularidad de carga útil e interoperabilidad para maximizar su efectividad. El proyecto incluye además importantes desarrollos en campos como sensores EO/IR, sistemas de propulsión, y comunicaciones por radio BLOS y LOS.

Uno de los principales objetivos es incrementar la soberanía en el diseño y fabricación de UAV tácticas, uno de los sectores identificados como críticos por la UE. En la actualidad, menos de la mitad de las plataformas en servicio están fabricadas por empresas europeas.