Toros

Albacete

Curro Díaz, con la mirada en Azpeitia tras recibir el alta hospitalaria

El torero jienense, que se encuentra psicológicamente afectado por todos los sobresaltos emocionales de los últimos días, comienza un proceso de rehabilitación tanto físico como mental

Curro Díaz esperando para hacer el paseíllo en el patio de cuadrillas de la plaza de toros de Las Ventas
Curro Díaz esperando para hacer el paseíllo en el patio de cuadrillas de la plaza de toros de Las Ventaslarazon

Aún con fuertes dolores tras la grave cornada que sufrió el pasado sábado, 15 de julio, en la Plaza de toros de Manzanares (Ciudad Real), Curro Díaz abandonó a última hora de la tarde de ayer la Clínica Santa Cristina de Albacete. Según nos comentan personas cercanas al diestro, «ha recibido el alta hospitalaria, pero todavía le cuesta mucho apoyar la pierna porque le tira bastante la herida». El diestro jienense, que durante estos días se encuentra en su domicilio familiar de Linares, deberá guardar reposo absoluto por prescripción médica durante 10 días y someterse a un tratamiento de antibióticos. El tiempo justo para reaparecer en la plaza de Azpeitia y hacer frente a sus dos compromisos con la afición. Una plaza que, a base de triunfos, se ha convertido en uno de sus grandes feudos. En 2016, se proclamó triunfador de esa feria tras realizar la mejor faena del ciclo. Concretamente, Díaz hará el paseíllo los días 30 y 31 de este mes. Dos corridas en las que lidiará toros de Ana Romero y Fuente Ymbro.

Pero, a pesar de encontrarse físicamente dolorido por la cornada de dos trayectorias (15 y 20 cm) en el retroperitoneo, con disección sin rotura de la arteria iliaca, personas cercanas al espada también nos revelan que Curro Díaz se encuentra anímicamente muy afectado por los últimos hechos ocurridos en torno a su figura: «El fallecimiento del matador de toros Iván Fandiño le ha tocado muchísimo. Iván era gran amigo suyo, dentro y fuera de los ruedos. Tenían una relación personal muy estrecha. Además, a esto hay que sumarle que volvió a Teruel un año después para torear la corrida homenaje a Víctor Barrio. Recordemos que fue él quien tuvo que estoquear al toro «Lorenzo», de los Maños. Fue una tarde de muchos recuerdos. Y luego, justo al día siguiente, el 9 de julio, en Pamplona, su banderillero Pablo Saugar “Pirri” recibe una dramática cornada. Durante estos días Curro ha sufrido duras emociones y el dolor psicológico que está viviendo es muy fuerte. La recuperación que debe llevar durante estos diez días es tanto física como mental».

La cornada que sufrió Díaz en Manzanares tuvo lugar durante la faena de muleta a su primer toro de Mollalta, cuando se encontraba toreando al natural a un toro rebrincado y justo de fuerzas. El astado le arrolló y de forma certera le corneó en la ingle izquierda.