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Ferias taurinas

Del Álamo corta cuatro orejas en la corrida «monstruo» de Cuenca

Enrique Ponce logró dos trofeos; El Juli, uno; y Manzanares saludó sendas ovaciones

Juan del Álamo, en imagen de archivo
Juan del Álamo, en imagen de archivolarazon

La plaza de toros de Cuenca acogió ayer, en la tercera de la Feria de San Julián, la llamada «corrida monstruo» en la que Juan del Álamo salió a hombros junto a Enrique Ponce tras cortar cuatro y dos orejas, respectivamente. El salmantino imprimió muletazos templados y hondos ante los dos de su lote, ejemplares con clase y recorrido. Asimismo, el valenciano dejó pasajes magistales ante el primero de la tarde y demostró entrega e inteligencia ante el quinto.

Por su parte, El Juli cortó una oreja del segundo de la tarde, que hubieran podido ser dos, de no marrar con los aceros; y José María Manzanares saludó sendas ovaciones por no estar acertado en la suerte suprema.

Así, en el coso conquense, en la tercera de la Feria de San Julián, se lidiaron toros de Daniel Ruiz (el 8º, como sobrero), de correcta presentación, nobles y con clase. Enrique Ponce, oreja en ambos; El Juli, oreja y aplausos; José María Manzanares, saludos y saludos tras aviso; y Juan del Álamo, dos orejas y dos orejas. Lleno en los tendidos.

Por otra parte, Alberto López Simón cortó ayer dos orejas del sexto en Colmenar Viejo (Madrid), donde se celebró el último festejo de la feria. Por su parte, Antonio Ferrera e Iván Fandiño perdieron los trofeos por fallar con los aceros.

Asimismo, el banderillero Javier Valdeoro, de la cuadrilla de Ferrera, perdió pie en la brega del cuarto y el toro le pasó por encima pisándole la zona lumbar. Según indicó su apoderado en Twitter, Raúl Gracia «El Tato» «Valdeoro es trasladado para estudio radiológico pero se descartan lesiones neurológicas».

Así, en este coso madrileño, se lidiaron toros de Antonio Palla y Los Eulogios (el 4º como sobrero), bien presentados y deslucidos. Antonio Ferrera, silencio en ambos; Iván Fandiño, ovación y silencio tras aviso; y López Simón, ovación y dos orejas tras aviso. Dos tercios de entrada.