«La lengua es el mayor activo colectivo que tenemos»

Arsenio Escolar lanza «Archiletras», un proyecto que culminará con una revista semestral de investigación.

Cuando empezó a gestarse «Archiletras» en la cabeza de Arsenio Escolar se creó el primer servidor de nombres de sitios web y hacía diez años que Martin Cooper, el directivo de Motorola, había realizado la primera llamada desde un teléfono móvil de primera generación, pero ni internet ni la telefonía celular eran como los conocemos en la actualidad. Nada podía hacer presagiar en abril de 1983 que 35 años después la revolución tecnológica transformaría la vida de las personas y permitiría la transmisión instantánea de contenidos e información, una inmediatez que ha procurado el mundo globalizado contemporáneo, en el que hace unos días nacía el proyecto más personal de este periodista al que un giro inesperado de la vida le desvió de su camino inicial, ser maestro de Lengua y Literatura, una pasión que perdura pese a los avatares de la vida. «Esta idea hace unos años no hubiera tenido las posibilidades tecnológicas, técnicas, de expansión y proyección como las que tiene ahora. Hoy en día, cualquiera desde cualquier rincón del mundo puede acceder a esta publicación», señala Arsenio, que no quiere restarle importancia al papel, «al que muchos han dado por muerto», porque «tiene futuro, solo hay que encontrar otras fórmulas que lo hagan atractivo y deseable, y creo que la prensa especializada es uno de ellos».

Revista para un público culto

Este nuevo medio de comunicación global y panhispánico de la lengua española acaba de llegar en su versión divulgativa impresa trimestral a los quioscos y librerías (más de 4.000 puntos de venta), a la red de internet y pronto cerrará el círculo ansiado por el comunicador con una revista científica semestral. «La idea original era una publicación que partiendo de la lengua afrontara las más diversas materias, pero es cierto que luego he ido depurando muchísimo la fórmula y, al final, ha nacido una revista para un público culto en general y, sobre todo, una herramienta de trabajo para profesionales que tienen la lengua como su materia prima ya sean profesores de español, lingüístas, filólogos, traductores, editores, correctores, y todos aquellos profesionales que tenemos el lenguaje entre nuestras herramientas principales de trabajo como publicistas, escritores, periodistas, sociólogos, políticos y politólogos», comenta Escolar.

Siempre que se lanza un medio, y Arsenio tiene una larga trayectoria en ese sentido porque ha formado parte del nacimiento de cuatro diarios, lo más complicado es encontrar los apoyos para hacerlo realidad. En este sentido, ha contado con la complicidad de una serie de empresas e instituciones como la Fundación Bancaria La Caixa, Banco Santander, Iberia, Bankia y Endesa, entre otros, y las Juntas de Castilla y León y Castilla-La Mancha que «tienen algún tipo de vinculación con la expansión en torno al lenguaje». Porque es precisamente la lengua «el mayor activo colectivo que tenemos», subraya Escolar, lo único que sostiene este sueño. «Hay pocas con el potencial económico, social, vital y cultural que aúna el castellano con más de 580 millones de hispanohablantes en todo el planeta y que, según las previsiones, se alcanzarán los 750 a mitad de este siglo», incide el presidente de la Asociación Española de Editoriales de Publicaciones Periódicas.

Enfrascado ya en el segundo número y en la puesta en marcha de la publicación de investigación lingüística, Escolar trabaja en una red de corresponsales para «que cualquier tema local pueda estar al alcance de cualquier usuario esté donde esté». «Un medio de comunicación hecho en castellano se puede consumir de manera instantánea en cualquier parte del mundo y eso es lo queremos, convertir “Archiletras” en un gran foro de formación, debate, promoción, investigación y evolución de la lengua española, que es nuestra», concluye.