María José Navarro

112 años

Estimado Sergio Ramos: Hoy, este domingo, cumple mi club ciento doce años de historia. No se si te suena siquiera. Es el Atlético de Madrid. Ayer, en el campo, hicieron el saque de honor unos tipos honorables que ganaron la Copa Intercontinental, que es seguramente igual de importante que el Mundialito de Clubes, ese triunfo del que presume una de vuestras estrellas limpiándose el escudo cuando acude a un estadio que acaba de regresar a Primera División. Esa, justo esa, la Intercontinental, la ganamos ahora hace cuarenta años. Te cuento todo esto porque igual no está de más que aprendas algo de historia del fútbol español. Nunca sobra, yo misma he sido capaz de aprenderlo (o sea, que no es difícil), y se lo debes a Luis Aragonés, que te hizo un hombrecito en la Selección. Verás, Luis entrenaba justo a ese equipo que se proclamó campeón del mundo. Intuyo que no te extraña que lo consiguiera. Se que le conocías bien y que él te tenía cariño. No es mi caso. Yo más bien te conozco por detalles como el que tuviste el miércoles en tu estadio. «Date la vuelta. Enséñame el nombre. No te conozco» le dijiste a Giménez, nuestro jovencísimo central uruguayo. Y quería agradecértelo en nuestro cumpleaños. No sabes la satisfacción que nos causas. Gracias de corazón. Ayer, viendo a Panadero Díaz y a Benegas, me acordé de lo importante y lo difícil que es ser defensa. De las cosas que hay que hacer por tu equipo. Y nunca usaron el menosprecio. A ver si vamos juntos al Museo de Cristiano Ronaldo, hombre, que me hace ilusión. Enhorabuena por pasar a semis. Es verdad que nosotros no lo merecimos.