Maternidad subrogada

El negocio de la subrogada: sólo un 25% para la gestante

Ser padres por esta vía supone hacer un desembolso de entre 42.000 y 211.000 euros, según la feria Surrofair. Las madres primerizas cobran la mitad que las experimentadas

Folletos publicitarios recogidos en la feria Surrofair, que se celebra este fin de semana en el hotel Weare
Folletos publicitarios recogidos en la feria Surrofair, que se celebra este fin de semana en el hotel Wearelarazon

LA RAZÓN entra en la feria de la maternidad subrogada

Después de que la feria de la subrogada –Surrofair– cambiara de emplazamiento por las críticas recibidas, voy con mi novio horas antes de que empiece la manifestación en contra. Necesitamos saber a qué se enfrentan las parejas que son infértiles. En el Hotel Weare Chamartín han optado por no hacer publicidad. De hecho, en los letreros de información se comunica otros eventos, como el de cirugía de pequeños animales, pero ni rastro de Surrofair. En recepción explican que es en el Salón Madrid. Accedemos a pesar de no llevar entrada. El primer stand donde nos detallan el proceso es Interfertility. Operan con EE UU, Canadá y Ucrania. Este «viaje» para ser padres gracias a una gestante tardará «15 meses, aunque puede alargarse». De hecho, según Surro Conexión, consultoría que facilita información gratuita a los que quieran ser padres por esta vía en EE UU, el tiempo de espera se eleva a dos años. Volviendo a Interfertility, el proceso de ser padres empezaría con una presentación. Un perfil que leerá la gestante. Será ella, como aseguran en esta agencia, quien decida en este stand, a qué progenitores «ayuda». Es importante decir por qué queremos ser padres. Pero, ¿y si ella en algún momento del proceso se niega? (Se ríe) «Ellas lo que nos preguntan es si es seguro que se lo van a llevar, ¿no irán a cambiar de opinión después?». Eso, me calma.

Pero antes de nada, es importante saber cuánto dinero nos costaría. En California, entre 100.000 y 200.000 euros. Es más caro que en estados del interior. Además, en caso de que tenga un embarazo de riesgo, los padres tienen que pagar la baja, dado que en EE UU no hay Seguridad Social. La gestante recibiría entre «25.000 y 40.000 euros en total, y 5.000 más si queréis gemelos. Aunque esa opción no os la recomiendo, porque hay más riesgo de complicaciones, que dé a luz antes de tiempo». Es decir, únicamente entre un 20 y un 25%.

En Grace, que sólo operan en California, nos informan de sus precios: entre 138.278 y 211.389 euros, dependiendo de si es uno o dos bebés, y si la gestante es primeriza en subrogada o no. Si tiene experiencia percibiría casi el doble: 63.642 euros frente a 34.276. Es decir, entre el 24 y el 30,1% de lo que se abona.

La gestante, como nos aseguran en los stands consultados, además de superar un test médico, tiene que tener hijos, al menos uno. Según el paquete que elijas, incluye seguro o no por si sufriera un aborto natural. «No os preocupéis hay muy pocos casos, y en todo caso, la mayoría se producen en el primer mes, pero si fuera en el tercero, ella tendría que volver a empezar, por lo que habría que volver a compensar» ciertos gastos, precisan desde Interfertility. Lejos de tranquilizarme, me preocupa. Si fuera mi caso pagaría un seguro.

En el resto de estados, la cuantía sería entre 70.000 y 100.000 euros. En Canadá, entre 60.000 y 90.000. «Es más económico porque antes había que esperar un año para conseguir gestante, ahora entre uno o dos meses y en verano tres. Además, allí sólo se paga a la gestante por los gastos ocasionados (14.266 euros)».

En el caso de Ucrania, el paquete más barato, con embriones propios, sale por 28.000, el más caro –que incluye desplazamiento, óvulos del donante e imprevistos posibles– 54.165. En el resto, nos recomiendan hacer un depósito de 15.000 euros para imprevistos. También nos explica que podemos elegir el sexo del bebé.

Pero, ¿qué país elegir? En Ucrania no sólo «los futuros progenitores han de estar casados y ser heterosexuales, sino que el padre será el padre, pero la gestante será la madre, y la progenitora únicamente la madre adoptante». No me parece bien. Es decir, aunque sean mis óvulos legalmente sería madre adoptante. «Por eso, recomendamos más los otros países», nos dicen en Interfertility, donde nos aseguran que nos pondrían un abogado en España y en el destino, ayuda psicológica, etc.

Salgo del stand convencida de haber tachado a Ucrania de la lista hasta que conozco a Rubén García, de Surrofamily. Su tono, algo borde o directo, lejos de producirme rechazo me da mayor confianza que alguien que me sonría y se intente poner en mi supuesta piel de infértil. Es algo meramente subjetivo. Ellos operan en EE UU y en Ucrania, pero me recomienda el segundo aunque sea más barato. Nos ofrece tres opciones: Económico (33.600 euros), Estándard (40.900) y Vip (50.900 euros). «Os aconsejo los dos últimos», afirma. Tras exponerle mis negativas, me dice que «en España lo adoptaría en cuatro o 12 meses». ¿Pero y si ella cambia de opinión? «La gestante firma tres contratos para evitar eso».

¿Cómo la escogéis? «Se elige gestante –que ha de ser madre mayor de edad y tener hasta 28 años– por estricto carácter médico». Curioso, en otro stand me decían que hasta 45 años. También difiere respecto al número de bebés. «Los precios que os acabo de dar son para gemelos. Siempre lo hacemos así, no hay problemas». Le pregunto por los que sí puedan darse. Y Rubén, reconoce que «de todo, como que una agencia cierre». Le preguntamos por otros países: «en Grecia y Rusia las gestantes tienen seis meses para reclamar al bebé».

Visitar más stands no nos despeja las dudas. De hecho, salimos de la feria con más interrogantes por resolver que antes y sin que nadie nos avise de que a nuestra salida casi un centenar de personas (60 o 70, según la Policía) aguardan al grito de: «¡Los explotadores, ahí están!».