Narcotráfico
Los buzos de la Guardia Civil encuentran 56 kilos de cocaína adosados al casco de un buque
En otra operación, se ha logrado la detención en Dubai del capo de la droga apodado “El Tigre”
La Guardia Civil ha intervenido 56 kilos de cocaína que estaban ocultos en la parte sumergida del casco de un buque en el puerto de Algeciras. La nave, con bandera Panameña que se encontraba en el fondeadero B del puerto de Algeciras.
El barco procedía de Rumanía y transporta trigo con destino al puerto de Rotterdam. Quedó custodiado por la Guardia Civil hasta que fueron activados buzos del Grupo Espacial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de Sevilla y Málaga para que hicieran una inspección del casco de la embarcación.
Se confirmó la existencia de unos bultos sospechosos en la zona de popa, cerca de la sala de máquinas. Tras una compleja tarea a cinco metros de profundidad, los buzos pudieron extraer un total de 44 paquetes que, tras las comprobaciones oportunas del “narcotest” dieron como resultado cocaína, arrojando un peso total de 56 kilos.
Por otra parte y en el marco de la lucha contra el narcotráfico, la Guardia Civi ha detenido a siete personas en los nueve registros simultáneos llevados a cabo en distintas provincias españolas en noviembre. Además de estas detenciones, también se han emitido tres órdenes internacionales de detención. Los detenidos están directamente relacionados con la introducción de 2.000 kilogramos de cocaína por el puerto de Algeciras hace dos años, en un contenedor procedente de Paraguay.
La operación ha permitido llegar hasta la cúpula de la organización, liderada por A.S.V, conocido como “El Tigre”, que residía en Dubai; está como el narcotraficante de origen español más importante a nivel global en lo que respecta al tráfico de cocaína.
Desde este paaís, a través de sistemas encriptados de comunicación, controlaba una red global de tráfico de cocaína con presencia en los cinco continentes. “El Tigre” en Dubái llevaba una vida de muy alto nivel; pasaba desapercibido entre el resto de la población, con un comportamiento ejemplar, sin ningún tipo de incidente que pudiera alertar a las fuerzas policiales locales.
A pesar de ello, a finales del pasado mes de agosto, la Policía de Dubái lo detuvo por una investigación interna sobrevenida y puso los hechos en conocimiento de la Guardia Civil.
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