Medio ambiente

La Junta quiere aclarar a la UE su plan de Doñana: "Falta rigurosidad"

Insiste en que la normativa no daña el humedal porque se legalizarán tierras de regadío "solo con agua en superficie"

El Parlamento andaluz vota hoy la proposición de ley registrada en la anterior legislatura por PP y Vox sobre la legalización de tierras de regadío en Doñana. Y, ante la utilización partidista de esta norma, la Junta busca hacer pedagogía para evitar que el Gobierno de Pedro Sánchez traslade una versión que no se corresponde con la realidad. Por ello, está tratando de «cerrar» una reunión con la Comisión Europea para aclarar que este nuevo plan de regadíos no daña el humedal y que es compatible con la situación de sequía en la que se encuentra por la acuciante falta de lluvias.

Según explicó ayer el portavoz del Gobierno andaluz, Ramón Fernández Pacheco, esta proposición lo que trata es de dar una solución a los agricultores de la zona, pero aclara que no se va a amnistiar de forma generalizada a los que hayan cogido agua de forma ilegal, si no que se va a analizar caso a caso para ver quien se puede acogerse a la normativa. Además, aseguró que las tierras que se legalicen para el regadío «solo utilizarán agua en superficie» y no del acuífero.

En el Consejo de Gobierno, el también titular de Medio Ambiente recalcó que por supuesto la Junta «comparte el diagnóstico científico» acerca del «momento crítico» que atraviesa este espacio natural y que no es «ajeno» al momento de sequía que «sufre el continente europeo en general y en especial la zona sur». Tras ello, Fernández-Pacheco incidió en que lo que se ha hecho con la nueva norma de regadíos es dar una respuesta a los agricultores ante «la falta de voluntad» encontrada en el Gobierno Central. En este sentido, criticó que el Ejecutivo de Sánchez se ha negado a convocar las mesas bilaterales solicitadas por la Junta de Andalucía «de todas las formas posibles». Además, criticó que al ser el único interlocutor con la Unión Europea, les está trasladando un planteamiento de la nueva norma que no es cierta. La Junta pide «rigurosidad» a los representantes del Gobierno de España y a sus portavoces en Andalucía y se ofrece a «ir de la mano» para «explicar a la Comisión Europea cuál es la propuesta», según abundó el consejero portavoz. Al respecto, informó de que «a través de la Oficina de la Junta en Bruselas, estamos intentando cerrar una reunión, pero el interlocutor es el Reino de España», insistió.

Respecto al Consejo de participación de Doñana celebrado el lunes, que abordó la proposición de ley de regadíos del PP, el consejero lamentó que los ponentes fueran «con ideas preconcebidas». En él «no se votó nada», subrayó, si no que «cada uno expuso su parecer». Lamentó, en este sentido, que ninguno de los participantes cambiase de opinión en el transcurso de la reunión. En su opinión, excepto el director de la Estación Biológica de Doñana, Eloy Revilla, le quedó la sensación de que el resto «iban con ideas preconcebidas».

En este Consejo de Participación, informó, se expuso también un informe del CSIC sobre la situación del acuífero, que la Junta comparte, si bien se intentó explicar que el nuevo plan del PP no va a contribuir a su sobreexplotación. Al director de dicho Consejo, Miguel Delibes, Fernández Pacheco le contestó que comparte con él «la solicitud que ha hecho de manera reiterada de que las administraciones con competencias en Doñana nos pongamos de acuerdo», pero le espetó que «no podemos compartir que la solución sea no hacer nada».