Sociedad

Málaga sigue pendiente del cielo

La provincia afronta restricciones en el consumo de agua una vez concluido el año hidrológico y con sus siete embalses al 15% de reservas, con tan sólo 95 de los 611,48 hectómetros cúbicos de capacidad total

Vista de La Viñuela, el mayor embalse de Málaga, del que bebe la comarca de la Axarquía y que vive una situación agónica tras cinco años de persistente sequía, algo que solo un otoño lluvioso, como prevén algunos modelos meteorológicos y esperan los municipios de la región. EFE/ Irene Martín Morales
El embalse de La Viñuela agoniza a la espera de un otoño lluviosoIrene Martín MoralesAgencia EFE

La situación de los embalses andaluces es muy desigual. Tras las últimas lluvias, almacenan 3.459 hm3, lo que supone el 28,91% de su capacidad total, tras un incremento de 33 hm3 (0,28%) en una semana. En comparación con la misma semana del año pasado, hay 1.141 hm3 más, ya que los recursos almacenados eran 2.318 hm3 (19,37%) y en relación con la media de los últimos diez años, hay 1.518 hm3 menos, dicha media es de 4.977 hm3 (41,59%).

El problema es que las precipitaciones han tenido lugar, principalmente, en las provincias de Córdoba, Sevilla, Cádiz y Huelva. En el caso concreto de la provincia de Málaga, se han registrado precipitaciones próximas a los 108 l/m en Pujerra y en el embalse de Guadalmansa. En el norte de la Axarquía, se han registrado en Alcaucín 41 l/m y en Alfarnatejo 48 l/m. La realidad es que es insuficiente, motivo por el que la provincia vuelve a afrontar restricciones en el consumo de agua una vez concluido el año hidrológico, ya que sus siete embalses se encuentran en torno al 16 por ciento de reservas, con solo 94 de los 611,48 hectómetros cúbicos de capacidad total.

Málaga capital y Axarquía son las comarcas que atraviesan una situación más preocupante y para las que se implementarán medidas de ahorro tras la reunión de la comisión de sequía de la demarcación hidrográfica de las Cuencas Mediterráneas Andaluzas, celebrada el pasado 10 de octubre, en la que se acordó que el consumo de agua de uso urbano no podrá superar los 180 litros por habitante y día, considerando todos los recursos hídricos disponibles en los municipios de los sistemas de Guadalhorce-Limonero (Málaga) y Axarquía-Viñuela (Almáchar, Benamargosa, El Borge, Comares, Cútar, Iznate, Macharaviaya, Moclinejo, Rincón de la Victoria, Vélez-Málaga, Totalán, Algarrobo, Torrox y Nerja).

En el encuentro, al que asistieron representantes de la Junta de Andalucía, de los usuarios y de organizaciones empresariales, sindicales y ecologistas, se abogó por aumentar la garantía para el abastecimiento humano y mitigar los impactos sociales, ambientales y económicos de la sequía.

Por su parte la Costa del Sol tiene el pantano con mayores reservas, el de la Concepción en Marbella, al 35,48 por ciento de su capacidad total.

Ante ese contexto, la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol que integra a una docena de municipios de la parte occidental de la provincia, ha resuelto rebajar a 200 litros por habitante y día el límite establecido para afrontar la situación de excepcionalidad.

Esta medida atañe también a las zonas sin regulación de la cabecera del Guadalhorce (Antequera, Archidona, Villanueva del Trabuco, Villanueva del Rosario, Mollina, Humilladero, Fuente de Piedra, Campillos, Teba, Almargen, Ardales, El Burgo, Cuevas del Becerro y Cañete la Real), y de la cuenca baja del Guadalhorce (Valle de Abdalajís, Villanueva de la Concepción, Casabermeja, Almogía, Carratraca, Álora, Casarabonela, Pizarra, Yunquera, Alozaina, Tolox, Guaro, Monda, Coín, Cártama, Alhaurín el Grande, Alhaurín de la Torre y Torremolinos).

Así las cosas, y a los efectos de cumplir con la explotación propuesta, se maximizará el uso de los recursos no convencionales como las aguas procedentes de la desalación y las regeneradas. En este último caso, y una vez satisfechos los derechos concesionales, se podrán emplear los recursos que no hayan sido utilizados, y siempre con la correspondiente autorización administrativa, en otros usos como riego de jardines.

Esta misma semana, el consejero de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Ramón Fernández-Pacheco, insistía en que la situación de sequía «sigue siendo crítica», aunque es más o menos grave según la cuenca.

Así, la Demarcación del Guadalquivir alcanza los 2.439 hm3 (30,37% de su capacidad total). Respecto a la semana anterior, ha experimentado un aumento de 38 hm3 (0,47%). Si se compara con la misma semana de 2023, registra 1.000 hm3 más embalsados.

El agua embalsada en las Cuencas Mediterráneas Andaluzas asciende a 258 hm3, lo que representa el 22,38% de su capacidad total de almacenamiento (1.152,83 hm3). Respecto a la pasada semana, se ha producido un descenso de 5 hm3, lo que representa una bajada de un 0,43%.

El agua embalsada en la demarcación Guadalete-Barbate, con una capacidad total de 1.651 hm3, asciende a 340 hm3 (20,59%). Respecto a la semana anterior, no se ha producido variación.

La sequía de 1995

El año próximo se cumplirán treinta de una de las peores sequías que se recuerda en la provincia malagueña, cuyos pantanos llegaron a almacenar apenas el 5% de su capacidad total.

Las primeras restricciones en el consumo se implementaron el 9 de enero de aquel año, cuando el caudal se redujo a la mitad; en ese contexto, se acordaron cortes que se repetían durante seis horas diarias con el objetivo de reducir el consumo de 1.600 a 1.400 litros por segundo, dado que el abastecimiento entonces solo podía garantizarse hasta el mes de abril de aquel año.

La provincia había encadenado cuatro años sin lluvias y llegó a registrar mínimos históricos con los seis pantanos existentes en el momento al 4,5 por ciento de su capacidad.