Sucesos

Pide una ambulancia tras ser detenido por robo y vuelve a ser arrestado tras fugarse del vehículo

Se localizó al fugado cerca de una vivienda de sus familiares en Coria del Río, emprendiendo de nuevo la huida saltando por las azoteas de las viviendas

La Policía Nacional en Coria del Río ha detenido a un hombre que se fugó de la ambulancia que el mismo había solicitado cuando se encontraba detenido en dependencias policiales.

Durante la detención, el individuo sacó de uno de sus bolsillos un pincho metálico, que tras colocárselo entre sus nudillos, arremetió contra uno de los agentes con la clara intención de clavárselo hasta en dos ocasiones.

Acto seguido, emprendió la carrera introduciéndose en el parking subterráneo de un establecimiento comercial, siendo perseguido por el agente antes referido, el cual consiguió darle alcance e interceptarlo.

Mientras el agente se disponía a reducirlo, éste, lejos de colaborar, acometió nuevamente de forma violenta contra el agente, alcanzándole algunos golpes y cayendo ambos bruscamente al suelo, intentando constantemente evadirse, no consiguiéndolo, ya que el agente consiguió reducirlo y asegurarlo.

Una vez en los calabozos de la Comisaría Local de Policía Nacional de Coria del Río, el detenido requirió la presencia de los servicios sanitarios, y cuando era trasladado al hospital para un reconocimiento más exhaustivo, vulneró todos los dispositivos de seguridad, fracturó la puerta de la ambulancia y se fugó a la carrera de dicha ambulancia.

Ante este incidente se activó inmediatamente el Protocolo de Actuación en este tipo de sucesos, desplegándose un amplio dispositivo de búsqueda del “fugado”, en el que participaron todos los agentes disponibles en ese momento.

Posteriormente, se localizó al fugado cerca de una vivienda de sus familiares, emprendiendo de nuevo la huida saltando por las azoteas de las viviendas de forma temeraria y poniendo en grave riesgo su vida, franqueando todo lo que se encontraba en su camino para intentar seguir ocultándose entre las viviendas a las que tenía posibilidad de acceder, introduciéndose finalmente en un domicilio ajeno.

Los agentes continuaron la persecución y accedieron al domicilio tras el fugado, al tener constancia de que en dicho domicilio se encontraba una mujer impedida y encamada de 98 años de edad, con el objetivo de proteger a la señora y detener al huido.

Tras inspeccionar todos los habitáculos de la vivienda, asegurando cada uno de ellos, se confirmó que efectivamente se encontraba la señora en la cama de una de las habitaciones, consiguiendo los agentes localizar al "fugado" escondido tras un mueble del salón, resistiéndose nuevamente de forma violenta a su detención.

A consecuencia del ataque, cuatro de los agentes intervinientes resultaron lesionados y tuvieron que ser atendidos en el centro médico de la localidad.

El detenido fue puesto a disposición de la Autoridad Judicial que decretó su inmediato ingreso en prisión.