Mascotas
Esta es la raza de perro más cara del mundo: puede pesar más que una persona adulta
Se trata de un tipo de can única y muy apreciada por su inteligencia, aunque también por su gran fuerza
Cunando uno piensa en un perro 'caro', generalmente la primera imagen que se le sobreviene a la mente es la un 'mejor amigo del hombre' peludo, pequeño y delicado. Sin embargo, entre la lista de los perros más costosos a nivel mundial, se cuelan varios que destacan por su exclusividad e importancia histórica, y que no son precisamente pequeños.
En la parte superior de la lista se encuentras algunas razas muy difíciles de criar y de encontrar, con características que las hacen únicas. Su elevado coste suele atribuirse a criterios como la rareza, linaje, demanda o el gasto de mantenimiento. Esta es la lista de los cinco perros más caros del mundo actualmente, de menos a mayor:
- Akita Inu, hasta 10.000€. Este perro, que ha inspirado en la historia de 'Hachiko', es un símbolo de fidelidad y honor en Japón. Son excelentes perros guardianes y familiares, además de tremendamente raros de encontrar fuera del país nipón.
- Chow Chow, hasta 11.000€. En China, tener este perro se considera un signo de alto estatus. Su linaje se remonta a miles de años atrás, y tiene un coste de mantenimiento altísimo, ya que su pelo grueso requiere mucho cuidado y pueden tener problemas de salud hereditarios.
- Löwchen, hasta 12.000€. Este perro es extremadamente raro, y solo nacen unos pocos cientos cada año en el mundo. Era una raza favorita de la aristocracia europea en la Edad Media, y su aspecto le valió el apodo de 'león en miniatura'.
- Samoyedo, hasta 14.000€. Su pelaje blanco y su 'sonrisa' lo hacen muy atractivo, aunque su pelo requiere un cuidado intensivo. Son de origen siberiano, y están criados para resistir temperaturas extremas y trabajar en trineos. Son amigables y enérgicos, lo que los hace deseados como mascotas familiares.
- Mastín Tibetano, hasta dos millones de euros. Este increíble can procedente del oriente asiático es un signo de riqueza en China, y hoy hablaremos más sobre él.
Esta es la raza de perro más cara del mundo: puede pesar más que una persona adulta
El mastín tibetano es una raza impresionante, conocida tanto por su tamaño como por su historia fascinante. Se trata de una de las razas más antiguas y tradicionales del mundo, originaria de las regiones montañosas del Tíbet, Nepal, India y China. Su historia se remonta a miles de años, y se cree que fue criado por las antiguas tribus nómadas tibetanas para proteger su ganado, casas y monasterios de animales salvajes, como los lobos, y de intrusos humanos.
Además, esta clase de mastín guarda una profunda conexión con la cultura tibetana y budista, ya que se dice que los monjes tibetanos usaban estos perros como guardianes en sus monasterios. Los tibetanos tenían una veneración tal por este perro que incluso le atribuían cualidades espirituales, y su presencia a menudo estaba asociada con la protección divina.
Pero no solo eran utilizados como guarda, sino también como símbolos de prestigio y estatus. El perro era tan valioso que se usaba como regalo para los emperadores chinos, y hoy en día continúa siendo un signo de gran riqueza material. En el pasado, esta raza se mantuvo bastante aislada en su región de origen debido a su naturaleza independiente y a las duras condiciones del entorno. No fue hasta finales del siglo XX que el mastín tibetano empezó a ganar popularidad en el resto del mundo.
El precio de esta raza canina tan exclusiva puede variar enormemente dependiendo de diversos factores como la ubicación, la reputación del criador, y la calidad del ejemplar. Los considerados de 'más alta pureza', pueden costar entre 10.000 y 20.000 euros, aunque muchos superan fácilmente esta cantidad, especialmente si provienen de una línea de campeones o de criadores muy exclusivos.
En 2011, un mastín tibetano fue vendido por un asombroso 1,9 millones de dólares a un empresario chino, lo que le confirió automáticamente el título del perro más caro del mundo, al menos por el momento. Se trataba de un perro 'de linaje puro' y excepcional, considerado el ejemplo más extremo del precio de esta raza, que no ha vuelto a dar desde entonces.
Características del 'mastín tibetano'
- Tamaño. Los machos suelen medir entre 66 y 81 cm de altura a la cruz, y las hembras son ligeramente más pequeñas, con una altura de entre 61 y 71 cm. El peso varía bastante según el ejemplar, pero los machos pueden pesar entre 45 y 73 kg, y las hembras entre 34 y 54 kg.
- Pelaje único. El mastín tibetano tiene un pelo grueso y denso que lo protege de las bajas temperaturas en su lugar de origen. Es largo, especialmente alrededor del cuello, donde forma una melena que le da un aspecto majestuoso. Se pueden encontrar ejemplares en tonos de negro, marrón, dorado, y también con combinaciones de colores.
- Cuerpo. Esta raza destaca por su cráneo, que es inmenso, ancho y con una expresión de alerta. Los ojos son oscuros y profundos, lo que le da una mirada muy característica. Además, son perros sólidos y musculosos, lo que les da una gran resistencia y capacidad para proteger a su dueño de posibles amenazas.
- Instinto de protección. El mastín tibetano es reconocido como uno de los perros más protectores que existen. Su instinto de guarda está profundamente arraigado, y no dudará en defender su territorio o a su familia si lo considera necesario. Aunque no es un perro agresivo por naturaleza, puede ser territorial y desconfiado con los extraños.
- Inteligencia e independencia. Son perros inteligentes, pero su naturaleza independiente puede hacer que sean algo tercos o difíciles de entrenar. No es el tipo de perro que buscará constantemente la aprobación de su dueño. Sin embargo, una vez que establece un vínculo de confianza, se vuelve muy leal y afectuoso con su familia.
- Problemas de salud. Aunque los mastines tibetanos son una raza resistente y sana en general, como todos los perros grandes, pueden ser propensos a ciertos problemas de salud. Estos incluyen displasias de cadera (la articulación de la cadera no se desarrolla correctamente), dificultades respiratorias, sensibilidad a altas temperaturas o una necesidad muy exigente de cuidados del pelaje.