Alimentación
4 formas de ayudar a tu cuerpo a desintoxicarse
Cada vez tratamos de cuidarnos más, pero sobre todo mejor. ¿Qué tienen las personas más ‘healthy’ en común?
Cada vez tratamos de cuidarnos más, pero sobre todo mejor. ¿Qué tienen las personas más healthyen común? Básicamente que no necesitan eliminar lo que sobra de su cuerpo (o casi), porque ni siquiera llegan a ingerirlo; fuera alcohol, azúcares o alimentos inflamatorios... Pero que no cunda el pánico. Sin tener que posicionarse en ningún extremo se pueden llevar a cabo cosas simples para ayudar a nuestros recursos naturales del hígado a hacer su trabajo como filtro, a impulsar la función hepática que ayuda a disminuir la acumulación de productos tóxicos en los tejidos. Y estos son algunas de ellas.
1. Bebe agua templada con limón: Algo de lo que ya hemos hablado en numerosas ocasiones. En ayunas, beber un vaso de agua tibia con limón recién exprimido (aunque no es necesario que sea un limón completo). Esta bebida mágica proporcionará, además, a nuestro cuerpo, electrolitos hidratantes en forma de potasio, calcio y magnesio. Por la noche nuestro cuerpo se encarga de los procesos de desintoxicación, por lo que es importante cada mañana hidratarlo y reponerlo. El zumo de limón también ayuda al hígado a producir más enzimas, que ayudan a la digestión. La vitamina C en el jugo de limón, un potente antioxidante, protege contra los radicales libres y ayuda con el fortalecimiento del sistema inmunológico.
2. Practica yoga: Muchas de las posturas de yoga nos ayudan en el proceso de desintoxicación de nuestro cuerpo, porque estimulan nuestra digestión, masajean nuestros órganos, y por tanto contribuyen al añorado proceso ‘detox’. Una gran cantidad de molestias digestivas vienen de estrés, por lo que además una serie de respiraciones profundas calmantes, nos ayudarán a relajar los músculos y el diafragma, permitiendo al sistema gastrointestinal hacer un mejor trabajo.
3. Come brócoli: Reduce la inflamación, que siempre se ha relacionado con enfermedades del corazón, diabetes y cáncer. Para luchar contra ella, nada mejor que llenar nuestro plato con alimentos ricos en azufre, como la cebolla, el ajo y las verduras crucíferas, como el brócoli, la col rizada, col rizada, coles de Bruselas, repollo y Coliflor. Todos estos alimentos son ricos en antioxidantes y apoyan la capacidad del cuerpo para combatir las toxinas. Un estudio de 2014 reveló que las mujeres que comían las verduras más crudas tenían sustancialmente menos inflamación que los que comían una menor cantidad.
4. Toma té: Por lo general una amplia variedad de té contiene el diente de león o el cardo de leche, que puede estimular la función del hígado, ayudando a disminuir la acumulación de toxinas en los tejidos. En una revisión de un estudio sobre el cardo de leche encargada por el Centro Nacional de Medicina Complementaria y Alternativa, los investigadores encontraron que esta hierba puede ayudar a mejorar la función hepática, posiblemente mediante la protección contra el daño celular, y estimular la reparación del tejido hepático. Estudios sobre el cáncer sugieren además que el cardo mariano puede fortalecer las paredes celulares para evitar que las toxinas traspasen, estimular las enzimas que hacen a las toxinas menos dañinas y bloquean los radicales libres que pueden atacar a las células.
✕
Accede a tu cuenta para comentar