Salud

5 razones para que los niños vayan pronto a la cama

Tener un sueño reparador y óptimo es una de las claves para gozar de una buena salud, sobre todo en el caso de los niños y niñas. Ahí van los argumentos.

5 razones para que los niños vayan pronto a la cama
5 razones para que los niños vayan pronto a la camalarazon

Tener un sueño reparador y óptimo es una de las claves para gozar de una buena salud, sobre todo en el caso de los niños y niñas. Ahí van los argumentos.

Incluso más que para los adultos, para los más pequeños de la casa, el sueño y el descanso son esenciales. Distintas hormonas, como la del crecimiento, tienen el pico más alto de segregación durante la noche. Su comportamiento e incluso su desarrollo físico y mental se ven alterados si no duermen las horas necesarias.

El sueño les ayuda a crecer. Es fundamental para que no tengan problemas de atención y tengan un aprendizaje normal. Además, es importante para que tengan una conducta adecuada, que no estén irritables e irascibles, y con buen estado de ánimo. Además, es fundamental para su desarrollo: la hormona del crecimiento se segrega durante las primeras fases de sueño profundo, por tanto si a un niño le privas de sueño, disminuye la secreción de esa hormona.

¿Cuánto necesitan dormir los niños? Con siestas incluidas, hasta los 12 meses una media de 12 a 16 horas, entre uno y dos años de 11 a 14 horas; de 10 a 13 horas (entre 3-5 años de edad), de 9 a 12 horas (entre 6-12 años de edad), y de 8 a 10 horas (entre 13 y 18 años de edad). "A partir de los seis años, cada niño tiene sus necesidades de sueño, pero no deberían ser menos de 9 horas. Si un niño está irritable, sin atención y parece cansado es que le falta sueño", afirma Milagros Merino, especialista en la Unidad Pediátrica de Trastornos de Sueño del Hospital Universitario La Paz (Madrid).

Rutinas que son necesarias. Para que un niño tenga una buena higiene de sueño, es esencial mantener horarios regulares, un entorno cuidado en una habitación confortable, evitar alimentos y bebidas que le exciten -como las bebidas azucaradas-, y el uso de aparatos electrónicos justo antes de acostarse. El ritual nocturno del baño o la ducha y un vaso de leche antes de acostarse pueden ayudarle al descanso.

El TDAH mejora con el descanso. Un tercio de los niños en España tiene problemas de insomnio: les cuesta dormirse, se despiertan varias veces por las noches o se despiertan muy pronto. Hay ciertas patologías como el Trastorno de Déficit de Atención por Hiperactividad (TDAH) en los que la mitad de los niños que lo sufren tienen, en general, problemas de sueño. Y se ha visto que "mejorando el descanso de estos niños, mejora también el TDAH", afirma la Dra. Merino. Por otra parte, los medicamentos sedantes no son recomendables.

Sí que va de 20 minutos. Según un estudio de la revista Pediatrics, los niños que no tienen unos horarios bien establecidos, además, tienen más dificultades para concentrarse y sobrellevar el día a día. De acuerdo con los resultados obtenidos, lo más importante es que la hora de ir a dormir sea cada día la misma, nunca con más de 20 minutos de diferencia entre un día y el siguiente.