Beber agua con limón, ¿ayuda a adelgazar?

Llevamos años escuchando y leyendo las numerosas propiedades que tiene sobre nuestro organismo el hecho de beber agua con limón por la mañana, siempre en ayunas. Son muchas las preguntas, pero una prima sobre el resto: ¿puede el agua tibia con zumo de limón recién exprimido ayudarnos en la pérdida de peso? Aquí está la respuesta.

Beber agua tibia de limón está considerado por muchos nutricionistas como una ayuda real ante la pérdida de peso, porque ayuda a acelerar el proceso. Además de poseer propiedades que son favorables para la pérdida de peso, el consumo de agua de limón también es beneficioso para limpiar las toxinas de nuestro cuerpo. Se trata de una buena forma de comenzar el día con un proceso ‘detox’ natural. Además, funciona de forma proporcional, así que cuanto más agua con limón, más se acelera la pérdida de peso.

Beber agua con limón ha mostrado resultados en términos de pérdida de peso, y las razones para ello son muy fáciles de entender. En primer lugar, la combinación de limón y el agua se compone de ingredientes naturales; las sustancias naturales (aquellas sin ningún tipo de aditivos, conservantes o elementos procesados) son las más saludables para el cuerpo humano. Debido a que es natural, no añade calorías a nuestro cuerpo cada vez que se bebe, porque el agua de limón tiene cero calorías.

Pero más allá de perder peso, también contribuye en otras acciones de nuestro cuerpo. Por ejemplo, si el colon no se limpia adecuadamente, los residuos pueden acumularse y, entre otras cosas, contribuir a elevar el riesgo de cáncer de colon a largo plazo. Esta acumulación de residuos persistentes también añade peso a su cuerpo, por lo que si se bebe agua de limón con regularidad, limpiaremos nuestros intestinos con mayor frecuencia. Como resultado, también perderemos algo de peso gracias a la eliminación de estos residuos persistentes. El agua de limón también ayuda al sistema digestivo mediante la reducción de las posibilidades de diarrea y estreñimiento, ya que favorece las funciones de los fluidos de nuestro intestino.

Mantener el hambre a raya

¿Sabías que también el agua tibia con limón reduce el apetito? Esto es debido a la presencia de fibra de pectina en limón, y es la explicación por la que el agua de limón tiene el efecto de reducir el hambre. Si en el pasado has intentado calmar el apetito con bebidas tales como el café o el té, trata ahora de hacerlo con el agua de limón, porque además, al contrario que estas otras bebidas, el agua de limón no engorda. En resumen, tanto el efecto “limpieza” que produce en nuestro cuerpo, como el hecho de calmar nuestro apetito hacen forman una ayuda completamente natural para ayudarnos en la pérdida de peso.