Investigación científica

¿Problemas de artritis? ¡Practica yoga!

El ejercicio, en general, aporta todo tipo de maravillas al cuerpo humano, como estabilización de las articulaciones para mejorar la masa muscular y así reducir la inflamación.

¿Problemas de artritis? ¡Practica yoga!
¿Problemas de artritis? ¡Practica yoga!larazon

El ejercicio, en general, aporta todo tipo de maravillas al cuerpo humano, como estabilización de las articulaciones para mejorar la masa muscular y así reducir la inflamación. Esto, sin duda, resulta bastante motivador cuando nos sentimos bien, pero no tanto cuando padecemos un dolor. El 44% de las personas con artritis confirman que no hacen ejercicio, y cerca de 80% no está lo suficientemente activa.

Sin embargo, un ensayo controlado aleatorio recientemente publicado en el Journal of Rheumatology ha encontrado que las personas con artritis que practican yoga pueden obtener impresionantes beneficios físicos y mentales. Los que practican yoga tres veces a la semana tuvieron una mejora en los niveles de dolor, la energía, el estado de ánimo y la salud física en comparación con el grupo que no practicaba yoga. Los efectos permanecieron incluso nueve meses más tarde.

Según publica la revista TIME, quien se hace eco de este interesante estudio, "hay una especie de mito que dice que si padeces artritis, lo mejor para tu cuerpo es descansar las articulaciones", dice uno de los autores del estudio Dr. Clifton O. Bingham III, profesor asociado de medicina de la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins y director del Centro de Artritis Johns Hopkins. "Creo que este estudio es la evidencia de que, en realidad, eso no es cierto."En él, los investigadores reclutaron a 75 adultos que no hacían ejercicio y padecían artritis reumatoide, una enfermedad que afecta a las articulaciones más pequeñas del cuerpo, como las muñecas, los pies y los tobillos o la osteoartritis de rodilla, que se localiza en la rodilla. Un grupo practicó un tipo especializado de yoga durante ocho semanas con clases de grupo específicamente diseñadas por expertos en artritis. Cada clase tuvo duración de una hora y se llevó a cabo dos veces por semana, además de una clase semanal en casa. El otro grupo ejerció como de costumbre, sin ejercicio.

Tras ocho semanas de estudio, ejercicio y análisis, las personas en el grupo de yoga vieron mejoras en todas las medidas en comparación con el grupo control. Sus puntuaciones de salud física, flexibilidad, los niveles de dolor, capacidad de caminar y la depresión eran mejores. Los beneficios duraron nueve meses más tarde, cuando los investigadores comprobaron de nuevo los resultados.

Es cierto que no todas las clases de yoga son seguras para personas con artritis, por eso es importante consultar con un especialista de la artritis antes de comenzar. Es importante preguntar también al profesor de yoga si tienen experiencia en tratar con esta dolencia. Yoga suave, yoga prenatal o clases diseñadas para una población de más edad o con discapacidad son buenos lugares para empezar.

Los resultados del estudio sugieren que el yoga suave puede ser una práctica segura para las personas con artritis, y que además no empeora los síntomas, de hecho, todo lo contrario.