Prevención

Aterriza en España el fármaco más eficaz contra la artritis psoriásica

Secukinumab, capaz de borrar los síntomas en el 30% de los pacientes, estrena una generación «milagrosa» de medicamentos contra esta enfermedad

Aterriza en España el fármaco más eficaz contra la artritis psoriásica
Aterriza en España el fármaco más eficaz contra la artritis psoriásicalarazon

Secukinumab, capaz de borrar los síntomas en el 30% de los pacientes, estrena una generación «milagrosa» de medicamentos contra esta enfermedad

Tras recibir la autorización para su uso en España, llega un nuevo medicamento para el tratamiento efectivo de la artritis psoriásica (APs) y la espondilitis anquilosante (EA), dos enfermedades reumáticas derivadas de la psoriasis grave o moderada y por las que se ven afectadas más de 500.000 personas en España. El fármaco secukinumab (comercializado como Cosentyx por Novartis) logra remitir, hasta en un 30 por ciento de los pacientes, casi todos los síntomas de estas patologías, especialmente en personas adultas.

En el 80 por ciento de los casos las personas con psoriasis desarrollan problemas reumáticos años después de que aparezcan los síntomas sobre la piel. Y es que, como explica José Luís López Estebaranz, jefe de Dermatología del Hospital Fundación Alcorcón, «la psoriasis afecta de forma fundamental, pero no exclusiva, a la piel. Puede afectar a las articulaciones, por lo que es importante un seguimiento periódico de los pacientes con psoriasis y hacer un screening periódico para descartar la aparición de afectación articular».

De hecho, más del 40 por ciento de las personas con psoriasis acaban desarrollando artritis psoriásica, una patología debilitante consistente en la inflamación de las articulaciones, la erosión de las mismas o la inflamación en los dedos (dactilitis). Al igual que la espondilitis anquilosante, que se caracteriza más por la rigidez en zonas como la columna vertebral o la caja torácica, lo que genera dolores de espalda y lumbares nocturnos, estas patologías pueden llegar a ser discapacitantes.

El problema, como señala Rubén Queiro López, jefe de Reumatología del Hospital Central de Asturias, es que «por desgracia, estos pacientes tienen un retraso medio de diagnóstico de unos cinco a siete años, lo que significa que muchos son remitidos tarde al especialista. Normalmente, cuando empiezan los síntomas tienen entre 20 y 30 años, y la mayoría no son diagnosticados hasta los 30 o 40 años de edad», aclara.

El nuevo tratamiento, que ha mostrado sus beneficios en varios ensayos clínicos en el que han participado casi 1.700 pacientes, «es prácticamente la única novedad que se ha producido en espondiloartritis (término que agrupa a las dos patologías en cuestión, entre otras), en los últimos 15 años». Concretamente, el fármaco es el primer y único inhibidor de la interleuquina-17A, una proteína que se halla en concentraciones elevadas en la piel afectada por la psoriasis.