Investigación científica

«La quimiosaturación es un prometedor tratamiento para el cáncer hepático»

Dr. Emilio Vicente y Dra. Yolanda Quijano / Director y Co-directora del Servicio de Cirugía General y Digestiva del Hospital Universitario. Madrid Sanchinarro y Centro Oncológico «Clara Campal»

Dr. Emilio Vicente y Dra. Yolanda Quijano / Director y Co-directora del Servicio de Cirugía General y Digestiva del Hospital Universitario
Dr. Emilio Vicente y Dra. Yolanda Quijano / Director y Co-directora del Servicio de Cirugía General y Digestiva del Hospital Universitariolarazon

En los últimos años un nuevo procedimiento se ha incorporado al arsenal terapéutico existente: la quimiosaturación

-¿Cuál es la incidencia de cáncer hepático en España?

-La incidencia del tumor primario hepático más frecuente (hepatocarcinoma) es muy variable, depende del genero, grupo étnico y región geográfica. España presenta una incidencia de aproximadamente 12/100.000 hombres y 3,5/100.000 mujeres, similar a la de Francia, y sólo superados por Italia y Grecia. Más de 5.522 nuevos casos son diagnosticados cada año. Por otra parte, el hígado, junto al pulmón, son los órganos más frecuentemente afectados por metástasis provenientes de tumores originados en otras localizaciones. Las metástasis hepáticas de cáncer colo-rectal son muy frecuentemente diagnosticadas. Entre un 10 y un 20% de pacientes con cáncer colo-rectal se presenta con metástasis hepáticas sincrónicas y aproximadamente un 40 y 50% de los pacientes presentarán enfermedad metastásica hepática una vez resecado el tumor primario.

-¿Cómo llega el diagnóstico?

-La mayoría de los síntomas del cáncer de hígado no son exclusivos de esta enfermedad, pudiendo estar presentes en otros procesos. Habitualmente se presentan en etapas en las que la enfermedad está muy avanzada, pudiendo el paciente permanecer asintomático hasta entonces. Entre estos síntomas podemos encontrar: pérdida de peso sin causa justificada, falta persistente de apetito, sensación de fatiga o debilidad, dolor abdominal, ictericia, fiebre o prurito generalizado. En caso de padecer cirrosis o hepatitis crónica, la manifestación clínica se manifiesta a través del empeoramiento del estado clínico.

-¿Cuál es su pronóstico una vez que se diagnostica?

-El progreso del proceso tumoral dependerá del tipo de tumor, primario o secundario, y de la situación de la enfermedad en el momento del diagnóstico. En los tumores primarios que habitualmente aparecen en el contexto de una enfermedad hepática crónica, el mencionado pronóstico va también a depender del estado funcional del hígado. El progreso de la enfermedad será más favorable en pacientes con tumores de hígado en estadios más iniciales, con buena función hepática, sin presencia de cirrosis, y con un buen estado general. Para los pacientes a los que se realiza resección quirúrgica del tumor, el predictor más importante de mala evolución es la existencia de un margen quirúrgico positivo, es decir, afecto macroscópicamente o microscópicamente, indicativo de una resección incompleta. Otros factores son la invasión de grandes vasos sanguíneos y un tamaño tumoral superior a 5 cms. en pacientes con múltiples tumores. La presencia de 4 o más nódulos, la afectación bilobular, la existencia de enfermedad extrahepática resecable, el valor de marcador tumoral preoperatorio y la afectación del margen de resección son factores predictivos de peor supervivencia en enfermos con metastasis hepaticas.

-¿Cuáles son las opciones terapéuticas más novedosas?

-En los tumores primarios hepáticos la oferta terapéutica actual es muy amplia. Oscila desde la administración de un tratamiento quimioterápico a la realización de un trasplante hepático. El número, tamaño y localización del tumor o tumores, así como el estado funcional del propio hígado condicionan la elección del tratamiento. El tratamiento de elección, siempre que las condiciones sean las adecuadas, es la resección quirúrgica. Sin embargo, el número de lesiones que pueden afectar ambos lóbulos hepáticos puede hacerlo imposible dada la magnitud de la resección y el escaso remanente hepático residual. En estos casos el riesgo de una insuficiencia hepática post-operatoria puede hacerla imposible. En estos casos, el tratamiento ablativo de la lesión, es decir su destrucción con calor (radiofrequencia, microondas), frío (criocirugia), conductividad eléctrica (electroporacion) o mediante la administración de haces finos de radiación, generados en unidades de megavoltaje (radiocirugia). Asimismo se debe de destacar el tratamiento local de los tumores con la inyeccion percutánea de etanol y la terapia quimioendovascular (Quimioembolizacion) que presenta una importante actividad citoreductora con preservación del parenquima residual. El trasplante hepático sigue representando una excelente opción para lesiones no diseminadas y no localmente avanzadas en pacientes con cirrosis hepática evolucionadas y con una importante alteración funcional del parenquima. En estos casos, la hepatectomia total y el implante de un injerto de donante cadaver o donante vivo representa la mejor y en ocasiones la única opción terapéutica. El tratamiento quimioterapico y más evidentemente inmunoterapico es una buena opción de recurso.

-¿Resulta posible combatir una metástasis hepática?

-Los procedimientos anteriormente citados son totalmente válidos para el tratamiento de las metástasis hepáticas. La diferencia entre los tumores primarios o secundarios está en la ausencia de patología parenquimatosa en los enfermos con enfermedad metastásica. Por ello, la resección quirúrgica juega un papel trascendental, siempre asociada a tratamiento quimioterapico, tratamiento que se efectúa antes o después de la resección quirúrgica. Importantes avances se han dado en los últimos años en este aspecto. Mejoras tecnológicas y avances en la técnica quirúrgica, asociados la mayoría de ellos a la cirugía del trasplante hepático lo han permitido. La novedad más significativa es la posibilidad de preparar/adecuar el tamaño y la función del hígado antes de la resección quirúrgica a través de la realización de una embolización portal pre o intra operatoriamente. Esto permite incrementar el tamaño del hígado y adaptarlo a la nueva situación que va a presentarse tras una importante resección quirúrgica, en ocasiones hasta un 70-75% del volumen total. Esta resección puede efectuarse en uno o dos tiempos quirúrgicos.

-¿Qué requisitos se tienen que dar para conseguir «revertir» la metástasis en un hígado?

-El tratamiento quimioterápico con o sin tratamientos ablativos asociados es en la actualidad la única posibilidad que ofrece la medicina moderna para controlar y revertir la enfermedad metastásica hepática. El índice de respuesta con la administración de nuevos fármacos es superior al 75%. La individualización del citado tratamiento quimioterápico efectuado según las características moleculares del tumor produce respuestas completas en un 20% de los enfermos con metástasis hepáticas. En los últimos años, se ha incorporado un nuevo procedimiento al arsenal terapéutico: la quimiosaturación.

-¿Qué tipo de cirugía se emplea, la abierta o la mínimamente invasiva?

-Las dos opciones son válidas para el tratamiento quirúrgico de estos enfermos. El tratamiento efectuado por vía abierta es el considerado como tradicional. Sin embargo, en los últimos 15 años la cirugía mínimamente invasiva ha ido ocupando un lugar de privilegio para el tratamiento de estos enfermos. Si bien, la cirugía laparoscópica es la técnica de elección, la cirugía robótica está avanzando de una forma muy significativa en los últimos años. La experiencia acumulada por nuestro grupo lo avala. De cualquier forma, el criterio de selección del enfermo es básico para poder efectuar la cirugía de una forma eficaz y sin incrementar el riesgo quirúrgico.

Novedad

«En los últimos años un nuevo procedimiento se ha incorporado al arsenal terapéutico existente: la quimiosaturación. Es la perfusión del hígado aislado vascularmente con dosis de un fármaco quimioterápico administrado en grandes dosis, dosis que si se administraran por vía sistémica serían letales. Nuestro grupo tiene experiencia en este prometedor tipo de tratamiento»