Trabajo

¿Ha llegado la hora de cambiar tu trabajo?

¿Ha llegado la hora de cambiar tu trabajo?
¿Ha llegado la hora de cambiar tu trabajo?larazon

Los seres humanos somos seres sociales. De ahí la importancia de relaciones en nuestra vida: relación de pareja, relación de familia, relación de amigos... Pero hay otra relación que la mayoría mantenemos durante gran parte de nuestra vida: nuestra relación con el trabajo.

Y es que nos pasamos muchas horas del día trabajando. Por desgracia, muchos nos quejamos de nuestro trabajo, y muchas veces no sabemos qué falla en nuestra relación laboral.

Según el estudio Bienestar y motivación de los empleados en Europa de 2015, alrededor de un 40% de empleados estarían dispuestos a dejar su empresa y un 41% se siente insatisfecho en cuanto a la conciliación trabajo-familia.

Por eso quiero presentarte un interesante ejercicio de coaching llamado Rueda Laboral. En Coaching trabajamos mucho con gráficos, tablas, visualizaciones, como puedes ver en estos ejercicios de coaching que puedes descargar gratis. Y también se trabaja con pie-charts, gráfico de tarta o rueda. Porque cuando todo en tu vida va bien, solemos decir: todo me va sobre ruedas. Pero cuando tu rueda no es balanceada y cojea, tu vida se vuelve más difícil.

Si estás a disgusto con tu trabajo actual, por un lado puede tratarse del tipo de trabajo que estás desempeñando en estos momentos, pero también pueden influir otros factores, tanto internos como externos.

Así que te propongo que evalúes del 1 al 10 cómo de cómodo te encuentras en los distintos aspectos relacionados con tu trabajo actual.

Nota: si alguna de estas áreas no es relevante o no existe (por ejemplo si eres freelance y no tienes compañeros o jefes), simplemente deja esas casillas vacías y no las tengas en cuenta. También puedes sustituir algunas áreas por otras que no aparecen aquí.

Te invito a que pienses si te sientes realmente valorado por el trabajo que haces. ¿Cómo saber la nota que deberías ponerle? En realidad es algo muy subjetivo, así que nadie mejor que tú para ponerle una nota a esta área de tu trabajo.

Puedes plantearte las siguientes cuestiones: ¿me siento motivado?, ¿me aprecian mis compañeros, mis superiores?, ¿recibo felicitaciones o feed-backs positivos?, ¿se me dan responsabilidades correspondientes a mi nivel de conocimiento y experiencia?, ¿puedo seguir creciendo en mi trabajo actual?, ¿se me escucha, se me tiene en cuenta?

El jefe se ve muchas veces como alguien dictatorial, autoritario, que no piensa en sus empleados. Afortunadamente no siempre es así. Yo puedo recordar superiores muy positivos, personas que incluso me han inspirado. Volvemos a lo mismo: a tu percepción subjetiva en tu relación con tus superiores. Piensa en cómo te tratan, te hablan, si te dan pocas o demasiadas responsabilidades, si confían en ti, si te apremian o se quejan de tu trabajo.

Muchas veces un mal jefe puede convertirse en la razón por la que odias tu trabajo. O todo lo contrario, un jefe que te inspira puede hacer que te guste un trabajo para el que ni siquiera estás hecho.

A veces esto último influye aún más que tu relación con los jefes. Y es que los compañeros son las personas con las que más interactúas en una oficina. ¿Quién no se acuerda de aquel programa de televisión, llamado “Cámara Café”, donde discurrían historias de todo tipo frente a la máquina del café de una oficina?

Para que un trabajo deje de ser mero trabajo y haya momentos de distensión o relax es importante que tengamos algún cómplice en la oficina y si es un amigo o alguien en quien confiar, mucho mejor. No se trata de llevarnos genial con todos los compañeros, pero sí de percibir a nivel general cómo me siento en el grupo, qué me llevo a casa después de una dura jornada laboral.

Éste puede parecer un término muy genérico y puede referirse a muchas cosas. A veces todo va bien en mi trabajo: me valoran, me llevo bien con mis jefes y compañeros, pero puede que la empresa esté teniendo problemas financieros y esto genere un ambiente laboral tenso. Puede también tratarse del lugar físico donde trabajas: instalaciones antiguas o un despacho sin ventanas.

Parecen aspectos secundarios, pero muchas veces influyen en nuestra sensación de comodidad o incomodidad en un trabajo. Aquí podemos hablar instalaciones cómodas, mobiliario adecuado para el trabajo, iluminación, sillas ergonómicas, ordenadores modernizados, disponer de una cocina o comedor, restaurantes o bares cerca del lugar de trabajo. El ruido también puede tener gran importancia en este aspecto: gente ruidosa a tu alrededor o algún tipo de máquinas, etc.

El tema del control en tu puesto de trabajo, como por ejemplo fichar hasta para ir al baño, puede ser otra de las razones por la que no estemos a gusto en nuestro puesto laboral.

En los tiempos que corren el salario es un tema casi tabú, al menos en España. Hay tanta crisis, tanto paro que parece que deberíamos dar las gracias por no estar en la calle. Y sin embargo el salario es una de nuestras grandes motivaciones laborales. De hecho muchos trabajos los hemos aceptado precisamente para poder pagar nuestras facturas, hipoteca, gastos, cuidado de los hijos, etc.

¿Pero qué ocurre cuando vemos que no nos da para vivir o estamos cobrando mucho menos de lo que nos corresponde? Creo que este punto no requiere más explicación y cada uno sabe perfectamente si está cobrando lo que le corresponde por la responsabilidad y las horas que le dedica a su trabajo. No olvidemos tampoco ese aspecto tan delicado: las famosas horas extra que muchas veces no son remuneradas.

No te engañes. Pregúntate: ¿te gustaría recibir más?, ¿estás cobrando ahora menos que en tus trabajos anteriores?, ¿estás deseando un ascenso o un cambio de actividad para ganar más dinero?

Y hablando de horas extra, no podemos dejar de mencionar un aspecto clave como nuestra salud que, a través de desajustes como estrés, ansiedad o burn-out, así como tensiones y dolores en el cuerpo, puede estar diciéndonos que deberíamos parar.¿Cómo afecta el trabajo a nuestra salud? ¿Cuántas horas le dedicamos al trabajo? ¿Estamos trabajando bajo mucha presión, trabajamos también los fines de semana, llevamos casi un año sin irnos de vacaciones?

Se trata de ver cómo influye el trabajo en nuestra salud, tanto física como psíquica. Ver cómo nos sentimos cuando volvemos a casa después de la jornada laboral: ¿estamos tan cansados que no podemos dar más de sí? ¿Cómo nos alimentamos? ¿Tenemos tiempo para hacer ejercicio y cuidarnos? Y es que el trabajo ocupa muchísimas horas de nuestra vida, pero es importante que no interfiera en nuestra salud, porque es la base de todo.

El eterno dilema de la conciliación laboral-familiar sigue estando a la orden del día. Como decía al principio de este artículo, más del 40% de trabajadores europeos no están contentos con este aspecto de su vida.

Y los que tienen hijos lo saben mejor que nadie.¿Cómo influye tu trabajo actual o los últimos trabajos que has tenido en tu vida familiar? ¿Trabajas 12 horas al día y llegas a casa con tanto cansancio que no tienes tiempo para dedicarle a tu familia? ¿Te toca trabajar los fines de semana? ¿Te sientes quemado, malhumorado, estresado después de tu jornada laboral?

Porque tu vida no es sólo familia y trabajo. También tienes tus hobbies, a tus amigos, tus viajes, tus vacaciones. ¿Sientes que tu trabajo influye negativamente en estos aspectos? ¿Has descuidado estos aspectos porque ya no das más de sí?

Cuando hayas puntado del 1 al 10 cada una de las áreas relacionadas con tu trabajo, observa cómo queda la rueda. ¿Es redonda y grande? ¿O resulta más bien irregular y con unas áreas más pronunciadas y otras hundidas? Si la hicieras girar, ¿giraría fácilmente o tendrías que empujarla con cada paso?

Ahora llega el momento de reflexión: ¿qué áreas han recibido la puntuación más baja? ¿Qué crees que significa esto para ti?

Este sencillo ejercicio de coaching te permite entender dónde te encuentras en estos momentos en el aspecto laboral, qué áreas influyen negativamente en tu percepción del trabajo que realizas actualmente. Es lo que en coaching llamamos tomar conciencia o darte cuenta de una situación actual.

El paso siguiente sería preguntarte qué puedes hacer al respecto, si ésta no te convence. Y a partir de ahí establecer un plan de acción con pequeños pasos que puedas medir en el tiempo para acercarte a tu rueda laboral ideal.

Recuerda que el cambio siempre está en tu mano y que no sólo se trata de analizar una situación, sino de tomar acciones para poco a poco acercarte a tu meta.

Y no olvides que si no estás satisfecho con tu trabajo, puede tratarse de que sencillamente no te llena lo que haces, no te sientes motivado, realizado ni aportando verdadero valor a los demás. Puede tratarse de que te encuentres estancado o aburrido, o por el contrario, agobiado y con demasiadas responsabilidades.

Pero antes de abandonar un trabajo o decidir que es hora de cambiar, se trata de entender qué falla en tu vida laboral: ¿el trabajo en sí u otros factores?

Uno de los errores comunes que se cometen a la hora de abandonar un trabajo es decidir cambiar únicamente por cuestiones económicas, sin haber comprobado si has agotado todas las posibilidades de crecimiento en tu empresa actual. Antes de emprender un cambio tan importante, revisa a conciencia todos los factores que influyen en tu insatisfacción laboral y sopesa tus posibilidades futuras.