Entrevista

Alejandro Fernández: «Mientras ERC tenga la llave de Sánchez, el PSC será un títere»

El líder popular asegura que la Generalitat «persigue liquidar el castellano y la cultura del esfuerzo» a través de sus políticas educativas

El dirigente popular Alejandro Fernández
El dirigente popular Alejandro FernándezMiquel González/Shooting

Alejandro Ferández (Tarragona, 1976) asumió en 2018 la presidencia de un Partido Popular Catalán con cuatro diputados en el Parlament. En las últimas elecciones generales, el PP obtuvo más votos catalanes que ERC y Junts.

¿Está el PP en un buen momento de forma en Cataluña?

Sí, sobre todo teniendo en cuenta que algunos daban ya por segura nuestra desaparición y nos pedían prácticamente que bajáramos la persiana y nos integráramos en otro partido. Estos datos positivos también los da el CEO, que no suele ser cariñoso con el PP, y nos sitúa entre los 13 y 17 escaños. Creo que el PP de Cataluña está recuperando una fuerza muy considerable.

Hablando de Ciutadans, ¿en qué se ha diferenciado su oposición al Govern con la de este partido durante la legislatura?

Tengo un gran respeto por Cs porqué hemos estado juntos en la batalla contra el separatismo. También pienso que cometieron errores importantes. No aprovechar la llave de la gobernabilidad de España cuando la tuvieron, por un lado, y dar la sensación de haber abandonado Cataluña, por otro. En cuanto a ideología, Cs ha tendido históricamente más a la socialdemocracia. Coincidimos en la cuestión nacional pero nuestros programas son distintos, y ahora es el PP quien vuelve a liderar al constitucionalismo catalán.

El fin de la presente legislatura va a depender de los Presupuestos. ¿Cree que ERC y PSC acabarán poniéndose de acuerdo?

Intuyo que sí. Mientras ERC tenga la llave para mantener a Sánchez en la Moncloa, el PSC seguirá siendo un títere de Pere Aragonés. Salvador Illa ejerce de mayordomo de Esquerra en el Parlament.

¿Cabría la opción de que su partido acabara invistiendo a Illa como sucedió con Collboni en el Ayuntamiento de Barcelona?

Para que ese escenario se pudiera producir, el PSC debería cambiar radicalmente. Es una opción que ahora mismo no está en el tablero. Ellos tienen una alianza estratégica con el separatismo tanto en el Congreso de los Diputados como aquí y son ellos los que han decidido excluir deliberadamente cualquier tipo de entendimiento constitucionalista en Cataluña.

Respecto a los malos resultados en Educación, ¿qué propuestas van a poner ustedes encima de la mesa?

En Cataluña no hay un problema presupuestario con la educación. Los presupuestos se han incrementado. Hay un problema grave de modelo que tiene que ver con dos obsesiones ideológicas: liquidar la lengua materna mayoritaria en la sociedad catalana (castellano) del sistema educativo y liquidar la cultura del esfuerzo. Proponemos recuperar la cultura del esfuerzo y la autoridad del profesor, garantizar que los libros no manipulen, cumplir las sentencias lingüísticas y recuperar una escuela realmente trilingüe. Con el actual modelo de imposición están convirtiendo el catalán en un idioma antipático para buena parte de la población.

En clave nacional, el acercamiento del PP a Junts previo a la sesión de investidura de Feijóo fue muy criticado por usted. ¿Qué debería hacer Junts para ser un interlocutor válido y un potencial socio del PP?

Lo primero, aceptar que vivimos en un sistema democrático y que España no es un estado fascista, como dicen ellos. Estoy dispuesto a hablar con todo el mundo que entre en los parámetros de respeto a las instituciones y de respeto a la ley. Lo que yo trasladé en mis críticas es que hay que preguntarse si Puigdemont es un prófugo golpista, y creo que en el entorno de mi formación está bastante claro. Es más, creo que Junts es un producto altamente tóxico del que conviene estar alejado.

¿Cómo, cuando y con qué intenciones cree que va a volver Carles Puigdemont?

No tengo la capacidad de meterme en semejante cerebro porque vivimos en dimensiones distintas. Lo que intuyo es que va a intentar hacerlo siempre para inducir el mayor daño posible a la democracia española. Lo que haga va a hacerlo con voluntad destructiva.

¿Cree que Junts conseguirá que se celebre un referéndum?

Creo es que todos los objetivos que el separatismo se ha marcado con Pedro Sánchez en la presidencia del Gobierno los han logrado. Han logrado indultos, suprimir la sedición, modificar la malversación, están camino de expulsar a la Policía y la Guardia Civil de Cataluña, están consiguiendo que el Gobierno de España permita el incumplimiento de las sentencias lingüísticas, están a punto de lograr la amnistía, y queda el último paso, efectivamente, que es la autodeterminación. Lo van a intentar, aunque espero que para entonces ya esté el PP en la Moncloa.

¿Cuál es su situación ahora mismo al frente del partido?

No me escuchará hablar de mi mismo ni de mi futuro en ninguna entrevista, tengo una gran responsabilidad. El presidente Feijóo ya ha comentado que después de las elecciones europeas será el momento de hablar sobre el Congreso del Partido Popular. Nos sentaremos y fijaremos fecha. Ahora no es el momento.

¿Se siente respaldado por la dirección nacional de su partido?

No he tenido ningún problema de ámbito personal. He tenido discrepancias, y creo que es sano que haya distintas opiniones dentro de los partidos. Afortunadamente mi partido no es como el PSOE, que ha expulsado a un referente como Redondo Terreros por discrepar con Sánchez. Hay grandes diferencias éticas entre PP y PSOE.

Dijo, respecto antiguos líderes del PPC, que «a Vidal Quadras le echaron por duro y a Josep Piqué por blando», ¿cómo le gustaría a usted ser recordado?

Como un político de principios, de valores, honesto y especialmente como un patriota. Creo que a eso me dedico y me he dedicado. Mis principios y mis valores son innegociables, y creo que eso es lo esencial de la vocación política.