Salud cardíaca

Un estudio avala el uso de un nuevo dispositivo sin cables en pacientes con riesgo de muerte súbita

Éste consta de un marcapasos sin cables y un desfibrilador subcutáneo que se comunican entre sí, lo que permite prescindir del uso de los electrodos, evitando así posibles complicaciones

Desfibriladores subcutáneos que evitan la muerte súbita
Los desfibriladores subcutáneos pueden evitar la muerte súbita y, paralelamente, reducen las complicaciones derivadas del uso de cables intravenososlarazon

Cuando un paciente sufre arritmias ventriculares graves y da muestras del riesgo de sufrir muerte súbita se recurre al uso de un desfibrilador implantable, un dispositivo que permite monitorizar el ritmo cardíaco, tiene capacidad para detectar las arritmias peligrosas y, en consecuencia, emitir descargas eléctricas, así como un ritmo demasiado lento del corazón, en cuyo caso emite pequeños impulsos como un marcapasos.

Sin embargo, éste tiene limitaciones. Para que funcione adecuadamente, el desfibrilador necesita unos electrodos, que llegan hasta el corazón a través de las venas, los cuales, al estar sometidos a una gran tensión, tienen un importante riesgo de fractura, en cuyo caso han de ser sustituidos, y además pueden provocar infecciones dentro del órgano. Así, hace unos años, se desarrollaron desfibriladores subcutáneos, que no requieren de estos electrodos, sin embargo éstos, por sí solos, no tienen la capacidad de estimulación para ritmos cardíacos lentos o de estimulación de ritmos cardíacos rápidos para detener la taquicardia, una función característicos de los marcapasos, de manera que solo están indicados para un tipo de pacientes concreto.

En este contexto, después de que salieran al mercado los marcapasos sin cables, la compañía Boston Cientific trabajó en el desarrollo de un nuevo dispositivo que hiciera a la vez las funciones del marcapasos y del desfibrilador, pero sin tener que recurrir al uso de cables y electrodos. La gran novedad del mismo es que logra que el desfibrilador subcutáneo y una pequeña cápsula sin cables colocada en el corazón "se hablen entre ellos", señala el doctor LLuís Mont, jefe de la Unidad de Fibrilación Auricular y del grupo de Biopatología y tratamiento de las arritmias cardíacas del Hospital Clínic.

En definitiva, este dispositivo incorpora un marcapasos sin cables y un desfibrilador subcutáneo, elementos ambos que ya existían con anterioridad de forma independiente, por separado, pero que ahora se comunican entre sí, y ello permite evitar las complicaciones derivadas del uso de los electrodos y cables intravenosos. Además, como indica el doctor, "estos dos sistemas se pueden implantar por separado o juntos, lo cual garantiza una mayor adaptación a las necesidades del paciente".

Eficaz y seguro

Recientemente, se ha valorado la seguridad y eficacia de este nuevo dispositivo mediante un estudio internacional multicéntrico, en el que han participado investigadores del Clínic-IDIBAPS, único centro español que ha intervenido en el mismo. En el marco de este trabajo, que se ha publicado en la revista New England Journal of Medicine, se ha realizado un seguimiento de seis meses a 162 pacientes, de los que 20 fueron tratados en el hospital barcelonés.

Sobre los resultados del mismo, el doctor Mont, que ha participado en el diseño del estudio, señala que "en cuanto a la eficacia del dispositivo, se ha comprobado que detecta las arritmias y en más del 95% de los casos estimula el corazón adecuadamente, así como también se ha visto que la comunicación entre el desfibrilador y la cápsula es correcta; mientras en lo que se refiere a la seguridad, las complicaciones son muy bajas".

Ante estos datos, Mont se atreve a asegurar que, aunque aún no ésta en el mercado, cuando se apruebe su uso, "este nuevo dispositivo será el sistema del futuro". "El desfibrilador clásico incluía el marcapasos, pero tenía el problema de los electrodos, mientras que el subcutáneo, pese a no tener el inconveniente de los cables, no contaba con marcapasos. Con este nuevo dispositivo, es posible hacer uso del subcutáneo en personas que necesitan marcapasos", resume el doctor, quien, por otro lado, indica que, debido a la complejidad de su implantación, requerirá un aprendizaje por parte de los profesionales.