Sociedad
El dueño del bar que repartió 400.000 € del Niño fue víctima del accidente de metro de Valencia
Este portugués afincado en Torrent reconoce que en la vida “hay cosas buenas y malas”
El propietario de un bar de Torrent (Valencia) que el pasado lunes repartió entre una treintena de clientes 400.000 euros del tercer premio del sorteo extraordinario del Niño fue uno de los 47 heridos del accidente de metro ocurrido el 3 de julio de 2006 en València donde murieron 43 personas. “Hay cosas malas y buenas en la vida”, asegura a EFE el portugués José Carlos Teixeira, propietario del bar ‘El Portu’, que afirma que una de las cosas buenas es repartir un número premiado (el 26.706), del que también se ha visto agraciado con 25.000 euros.
La mala, añade, “fue que el 3 de julio del 2006” tuvo la “desgracia del accidente de metro” con el descarrilamiento en las inmediaciones de la estación de Jesús, un siniestro del que, afirma, salió vivo y no le “pasó nada” pero del que se le ha quedado “todo grabado en la cabeza. No se olvida eso, todo lo que pasó en ese momento”. Recuerda que estuvieron una hora y cinco minutos encerrados el metro accidentado. “Intentamos salir y era imposible salir de allí, ni los martillos ni nada funcionaba, el de emergencias tampoco” y asegura que todo aquello “era un caos”.
Cuando buscaba una salida se encontró con una niña atrapada entre los hierros, a la que cogió en brazos -"se agarró a mi cuello y arranqué la puerta del conductor para salir por ahí"- aunque no estaba ni el conductor ni la revisora porque “se ve que salieron despedidos”. “Fueron unos momentos muy críticos”, recuerda José Carlos Teixeira, que añade que ahora se encuentra “bastante bien”. “Pero lo tengo en la cabeza, no se va, mis amigos me animan, tengo una chica y ahora haré un viaje a mi país para pasar allí unos días”, relata.
Respecto al premio de la Lotería del Niño, explica a EFE que fue su pareja quien se dio cuenta de que habían repartido el número premiado y, a partir de ahí, empezaron a llamar “a todo el mundo y, con la alegría del momento, se montó la fiesta y el teléfono no paraba de sonar”. “El premio se ha repartido a gente que lo necesitaba de verdad”, asegura Teixeira, que añade que a él le ha hecho “un gran favor”: “Así pago mi préstamo y me ha salido bien porque tengo casi firmado el traspaso del bar. Mejor para mí todavía”. Según indica, “llevábamos aquí un añito y medio mal, todo muy ajustado” pero con este premio “ha llegado la alegría” a todos los clientes de un bar situado en una localidad, Torrent, de la que procedían muchas de las víctimas de aquella tragedia ferroviaria.
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