Atención psicológica para sobrellevar la desgracia

En tragedias como la vivida el pasado miércoles en Peñíscola (Castellón), tras el derrumbe de un edificio que dejó dos víctimas mortales (una mujer y su hijastro de 14 años), la atención psicológica de mano de los expertos es fundamental para sobrellevar el trance.

Según ha explicado a EFE el portavoz de Psicoemergencias, Mariano Navarro, tres psicólogos acudieron en la mañana de ayer al puesto de mando avanzado, en la conocida como “zona cero” del derrumbamiento de un edificio de apartamentos en la urbanización Font Nova.

Tras ser informados de la situación, parte del equipo de psicólogos se dispuso a acudir al hotel en el que se encontraba el padre del menor que había sido hallado sin vida y pareja de la mujer que todavía se encontraba desaparecida ara ver cómo estaba.

Sin embargo, fueron requeridos de nuevo para que volviesen al lugar del derrumbamiento porque acababa de llegar a la zona un segundo hijo de la mujer que, todavía a esa hora, se buscaba entre los escombros -hermano del joven de 26 años que sobrevivió y que se encuentra ingresado en la UCI pero estable-.

“Los psicólogos estuvieron con él hasta que los bomberos encontraron el cuerpo sin vida de su madre”, ha detallado Navarro.

Por otra parte, también atendieron a la madre del joven de 14 años cuyo cuerpo fue hallado sin vida, y la acompañaron, junto al padre, que permanecía en un hotel, al hospital donde se había trasladado el cadáver de su hijo, para acompañarles en los trámites necesarios en estos casos.

Tras estas intervenciones, los psicólogos aguardaron junto a este hombre -el padre del menor fallecido- en el hotel los resultados de la búsqueda del cuerpo de su compañera sentimental, que finalmente fue hallado por la tarde.

Tras estas primeras intervenciones de emergencia, el equipo de psicólogos ya se ha retirado de la zona, dejando en manos de los servicios sanitarios de salud mental la atención que sea necesaria para los familiares de las víctimas.