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Picasso: Así será el retrato del artista de Saura y Banderas

Marion Cotillard podría ser Dora Maar en este filme coproducido por España y Francia que comenzará a rodarse en ambos idiomas en septiembre de 2018. Se recoge de esta forma el proyecto con el que, allá por 2012, soñó el director de «La caza», pero que no pudo ser. Ahora sí, una cuenta pendiente menos.
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Marion Cotillard podría ser Dora Maar en este filme coproducido por España y Francia que comenzará a rodarse en ambos idiomas en septiembre de 2018. Se recoge de esta forma el proyecto con el que, allá por 2012, soñó el director de «La caza», pero que no pudo ser. Ahora sí, una cuenta pendiente menos.
Carlos Saura y Antonio Banderas tenían una cuenta pendiente. Entre ellos y con un tercero: Pablo Picasso. El asunto viene de antiguo. En 2012 ya se hablaba como una realidad de este proyecto soñado por el director de «La caza». La confluencia con el productor Elías Querejeta parecía hacerlo más que factible. Al carro se sumó ese otro «malagueño universal» que es Antonio Banderas. «Nací a dos cuadras de donde Picasso vino al mundo», le gusta recordar al intérprete. Todo parecía encajar, hasta que los problemas de financiación y la negativa de Saura a rodar en inglés para no desvirtuar al personaje dieron al traste con aquel guión, «33 días» (los mismos que tardó Picasso en pintar el «Guernica»), que parecía atado y bien atado. Entre medias, Querejeta nos dejó; Saura siguió inmerso en sus musicales; y Banderas cerraba con HBO un acuerdo para dar vida al pintor en una serie de televisión, «Genius», producida por Ron Howard. El Picasso de Saura se antojaba, visto desde fuera, un proyecto quimérico.
Sueño hecho realidad
«Pero no es sueño, ahora es una realidad», advertía ayer a LA RAZÓN el realizador aragonés. «Picasso y el Guernica» (nuevo guión, nuevo nombre, pero misma filosofía) se hará. Y se hará en 2018 de la mano de la productora española Pipa Films. Probablemente, según concretó el equipo del director a este periódico, se comenzará a rodar en septiembre del año que viene, cuando Saura haya finalizado el rodaje del musical «El rey de todo el mundo» en México, y Banderas culmine su interpretación de Picasso para «Genius». El actor, que durante años ha sopesado con temor y ansia a la vez la posibilidad de meterse en la piel del artista malagueño al que tan cercano se siente, no tendrá tiempo de soltar el pincel y quitarse la camiseta a rayas entre ambas producciones. Durante varios meses vivirá inmerso en la piel del artista. «Creí que tendría que elegir, pero ya sé que no, voy a hacer los dos, y lo que aprenda de uno se lo daré al otro», dijo ayer tras recibir el Premio Nacional de Cinematografía en el Festival de San Sebastián. Precisamente allí fue presentado por Saura, quien por fin pudo anunciar que el filme que ha escrito y reescrito, su espinita, está listo para salir adelante. Hace tres semanas los flecos empezaron a cerrarse.
«Todo está bastante avanzado –mantuvo para LA RAZÓN–. Hemos hablado con Banderas y a él le encanta el guión. Uno de los problemas por los cuales se retrasó el proyecto es que yo no quería hacerlo en inglés sino en castellano y francés, que es lo que me parece lógico teniendo en cuenta, además, que Banderas en malagueño». El proyecto original contemplaba el inglés como prioridad para llegar a un público masivo. Se trataba de una producción más ambiciosa que, sin embargo, no colmaba las expectativas artísticas de Saura: «Ésta va a ser una película más modesta, no tan pretenciosa económicamente como la otra, pero más cercana a lo que yo quería hacer», asegura. Se tratará de una coproducción hispano-francesa, aunque están pendientes nuevas inversiones desde México. Banderas sabe que, tratándose del autor de «Cría cuervos» o «Elisa vida mía», su Picasso no va a ser un «biopic» al uso: «Saura va a hacer arte, no va a ser realista, será una película de estudio, muy cuidada». La fotografía de Vittorio Storaro, otro de los que se suman al barco, garantiza un sello reconocible para los incondicionales de la obra de Saura.
El fracasado proyecto de «33 días» se llevó consigo al cajón a una Gwyneth Paltrow en el papel de la amante de Picasso, Dora Maar. Ahora, sin embargo, es otra gran estrella la que está mejor posicionada para ese rol: la francesa Marion Cotillard. La actriz de «De óxido y hueso» es la primera opción de los productores, aunque también se baraja la posibilidad de Bérénice Bejo («The Artist»). Dora Maar se antoja un papel goloso: artista como Picasso, compartieron vida durante 10 años, entre 1936 y 1946. Ella estaba al lado del malagueño mientras componía su obra maestra, el «Guernica», sobre cuya realización girará el filme de Saura. Para Banderas, retratar desde España al pintor más universal de Málaga es un acto de justicia. Él, desde su corazón malagueño, pone en valor la importancia de su ciudad para un pintor que vivió exiliado gran parte de su vida. «Málaga parece la niña tonta en la vida del pintor, pero es una lástima que el dictador se muriera dos años después de Picasso y no nos permitiera verle pasear por la Malagueta».
El encuentro entre Saura y Banderas en San Sebastián, donde se fundieron en un cálido abrazo, permitió despejar dudas sobre esta producción. Saura acudió al Festival para presentar el documental «Saura(s)», en el que Félix Viscarret disecciona su vida y obra a partir del encuentro del aragonés con todos y cada uno de sus hijos. Viscarret, combinando una estética semejante a los musicales de Saura con el fluido diálogo con sus familiares directos, logra abrir una puerta hacia la intimidad y los recuerdos de un director que no está acostumbrado a mirar hacia atrás ni a regodearse en sus pasados éxitos. Para Banderas, la visita a San Sebastián vino precedida de una llamada en «un día gris» en Londres donde se le notificó la concesión de este Premio Nacional de Cinematografía que reconoce su trayectoria. Ayer, en la ciudad vasca, recordó sus inicios: «Espero que, tras 37 años de carrera, mi trabajo le haya sido útil a alguien, a algún actor, a alguien a quien arranqué una sonrisa, útil a quienes se rieron conmigo, y útil a mi tierra. No me gusta lo de hablar de mi carrera, yo he hecho de todo, en todos los géneros, porque creo que esa es la misión de un actor, y lo hecho a través de la mirada de directores distintos. El cine tiene un alma propia, rebelde, que puede ser usada por todos aquellos que tengan algo que decir».
El actor donará los 30.000 euros del premio a la Escuela Nacional de Arte Dramático de Málaga. Paz Vega (otra que recibió premio ayer, el Jaeger LeCoutre) consideró que el intérprete es «un modelo a seguir, un actor por los cuatro costados, una persona tocada por la varita mágica». Para el ministro de Cultura, Íñigo Méndez de Vigo, Banderas «dejará el mensaje de un luchador agradecido que jamás dejó de amar a su país». Halagos todos ellos que el malagueño recibe justo antes de enfrentarse al que quizás sea el papel de su vida: Picasso.