![Bahía de Genoveses, en el parque natural de Cabo de Gata-Níjar](https://fotografias.larazon.es/clipping/cmsimages01/2020/06/26/411AF869-DDC3-4A80-BBE0-237E0BE086F6/66.jpg?crop=480,480,x400,y0&width=150&height=150&optimize=low&format=webply)
Festival de San Sebastián
«C'est la vie», una buena comedia francesa
![Los directores de "Le sens de la Fete", Eric Toledano y Olivier Nakache y el actor Gilles Lellouche, hoy durante la presentación de su película en la sección oficial de la 65 edición del Festival Internacional de Cine de San Sebastián](https://fotografias.larazon.es/clipping/cmsimages01/2019/08/09/FCF3724E-E137-4A17-9DC5-BCC65CE05818/98.jpg?crop=1031,580,x0,y59&width=1900&height=1069&optimize=low&format=webply)
Los autores de “Intocable” vuelven a hacernos reír, sonreír, y pasarlo muy bien en la proyección con su nueva comedita “Le sens de la fête / C’est la vie”. Ellos son Olivier Nakache y Éric Toledano, quienes cuentan con unos magníficos actores y actrices que asumen con perfección los personajes creados por los autores. Por ejemplo, Jean-Pierre Bacri y Gilles Delouche. La historia, desenfrenada, transcurre en unas horas en un castillo convertido en lugar para bodas y otros festejos. Con extraordinaria habilidad, se construye la trama y durante el banquete de boda ocurre de todo: el cordero está en mal estado, van otro lugar en busca de un amigo que le resuelva ese segundo plato, tratan de darles a los invitados el máximo de hojaldre salado para hincharlos... Este es el marco de un montón de relaciones muy bien entretejidas: amorosas, laborales, malentendidos, fotógrafo que odia a quienes le hacen la competencia con móviles, etc... Comedia, pues, muy recomendable.
No es el caso de la otra película a concurso. “Handia”, de Jon Garaño y Aitor Arregi, codirector el primero y coguionista el segundo de la apreciada “Loreak / Flores”, presentada hace unos años en este mismo festival. “Handia” comienza muy bien, parece como un cuento en el que asistimos a una de las guerras carlistas, para a continuación, en un caserío guipuzcoano, volvemos a encontrarnos con los protagonistas, dos hermanos, de los cuales uno comienza a crecer sin pausa hasta convertirse en un gigante de dos metros y medio que, para ganarse la vida, se exhibe como atracción de feria. Esta especie de cuento se estropea cuando acuden a Stonehenge, en Inglaterra: a partir de ese momento, todo es muy grotesco, y además entra en acción otro gigante, e incluso una giganta, al parecer para alegrarle la vida al protagonista.
✕
Accede a tu cuenta para comentar