«Érase una vez en Hollywood», la biografía particular de Tarantino
La que puede ser la mejor cinta del cineasta llega aureolada por una crítica que casi ha cerrado filas en torno a él. Brad Pitt, DiCaprio y Margot Robbie le acompañan en este viaje en el tiempo.
La que puede ser la mejor cinta del cineasta llega aureolada por una crítica que casi ha cerrado filas en torno a él. Brad Pitt, DiCaprio y Margot Robbie le acompañan en este viaje en el tiempo.
Según el hombre más poderoso de Sony, de nombre Tom Rothman, productor del último filme de Tarantino, esta película tiene el mejor final que jamás hayas visto. Quizá la afirmación nos resulte un poco exagerada, pero sí es cierto que la mayor parte de críticos están de acuerdo en que la cinta es la más personal del histriónico director. Sin embargo, a él le caben sus dudas, aunque entiende el por qué de tal afirmación: «Entiendo por qué lo están diciendo. Todas mis películas son dolorosamente personales. Las entierro bajo diversos géneros para no desnudarme de una forma demasiado obvia, aunque siempre acabo por desnudarme». Y añade: «El filme se desarrolla en la ciudad que recuerdo de mi infancia. Yo diría que se trata de un libro de memorias acumuladas en mi infancia al que he vuelto ahora para investigarlas más en profundidad, de ahí que haya gran cantidad de experiencias personales». ¿Habría podido dirigirla sin haber vivido en Hollywood? «No creo que hubiera sido capaz sino me hubiera empapado por haberlo vivido de lo que era y representaba Los Ángeles en un momento concreto», explica. Y echa la vista atrás para recordar la banda sonora de aquellos años: «Yo ya vivía allí en 1969, era un niño, pero sabía ya que la radio más importante en esos días era la 93 KHJ. Sonaba allá donde fueras. Así que lo que hicimos fue conseguir jingles, sintonías, anuncios de la época para que se convirtiera en una presencia permanente, como en el caso de ''American Grafitti''. Y es ese sonido el que se convierte a su vez en narrador y en una guía para transitar por la ciudad en aquel 1969».
La novena película del padre de «Reservoir Dogs» nos muestra una historia centrada en sus personajes, hombres y mujeres que lidian con sus problemas más íntimos, entre ellos los sueños no cumplidos a medida que van cumpliendo años. En Hollywood está lucha es especialmente dramática ya que el éxito y el fracaso son vecinos de puerta. El filme reúne a dos de los actores más emblemáticos, Brad Pitt y Leonardo DiCaprio, alunizando en una era que empieza a disiparse, pero donde otras tendencias en el cine rezuman por cada esquina de la ciudad, aunque el «star system» de Hollywood empieza a mostrar sus grietas. «Tuve que empaparme con series de TV y películas de la época que Quentin me había mandado como tarea. He sido capaz de descubrir un mundo que desconocía y que me ha sorprendido favorablemente. Un montón de actores que se han perdido a lo largo de la historia, pero Quentin es un gran cinéfilo capaz de apreciarlo y compartirlo. En cierta forma este filme es una carta de amor, un homenaje a aquellos que han trabajado en esta industria y que han sido olvidados», comenta DiCaprio. En el centro de esta vorágine se sitúa Rick Dalton, interpretado por Leo DiCaprio, actor que ha dado vida la serie de TV «Bounty Law», un hit televisivo de los años 50 y 60, pero sin que su salto a la pantalla grande se llegara a materializar. Hollywood está evolucionando hacia una estética más hippie y Rick comienza a plantearse que quizá su momento haya pasado.
A la vera de Rick está Cliff Booth, un ex héroe de guerra convertido en especialista de cine para Rick. A pesar de todas sus calamidades se tienen el uno al otro. Cliff ha probado a Rick su gran lealtad. «Piensa que en aquella época estas amistades de actor/especialista se mantenían durante toda una vida. Eran familia. Lo podemos ver en Steve McQueen y Bud Ekins o con Burt Reynolds y Hal Needham. Desarrollaban un vínculo muy especial», señala Pitt. Aparte de DiCaprio y Pitt, la historia nos muestra una mezcla de personajes reales y ficticios. Así, Al Pacino da vida a Marvin Schwarzs, un agente dedicado a vender westerns italianos, Kurt Russell es un coordinador de especialistas, Dakota Fanning forma parte de la familia Manson, Margot Robbie interpreta a Sharon Tate, la vecina de Rick Dalton. Para Margot Robbie, tanto Sharon como Roman representan todo lo que Rick Dalton quisiera tener y no tiene. Pero no todo han sido alegrías alrededor del filme. Ni la familia de Sharon Tate ni la de Bruce Lee parecen estar muy de acuerdo con la presencia de sus seres queridos en la película.
En una reciente conferencia de prensa en Moscú, el director daba explicaciones de la imagen un tanto prepotente y arrogante del maestro Bruce Lee. Desde que se estrenara la película en EE.UU. algunos seguidores de Lee han mostrado su rechazo a como se le representa. En particular su hija Sharon quien ha declarado que se sintió incómoda cuando vio la película y la gente se reía del actor que interpretaba a su padre, de quien ha destacado su filosofía de vida muy determinada «que Tarantino ha barrido». El director le definió como un hombre «un tanto arrogante. Solo había que ver cómo hablaba, y eso no me lo he inventado yo», para añadir que está en su derecho de hacer lo que quiera al tratarse de una ficción . A estas quejas se une el disgusto de Debra Tate, hermana de Sharon, que ha mostrado su disgusto por la explotación del asesinato. A Tarantino solo le pidió que no hiciera coincicir el estreno con aquel fatídico 8 de agosto de 1969.