Muere la escritora estadounidense Harper Lee, autora de «Matar a un ruiseñor»

Se fue en silencio, tal y como había decidido estar en el mundo con el paréntesis del año pasado tras el anuncio de la (pre)secuela de su novela "Matar a un ruiseñor""Ve y pon un centinela".

Se fue en silencio, tal y como había decidido estar en el mundo con el paréntesis del año pasado tras el anuncio de la (pre)secuela de su novela "Matar a un ruiseñor""Ve y pon un centinela", de la editorial HarperCollins. En realidad, resultó ser el borrador del primer título citado, indispensable en la literatura estadounidense que sirve para abordar la desigualdad racial y la violación en Estados Unidos. Publicada en 1960, de la cual se han vendido más de cuarenta millones de copias en el mundo, "Matar a un riuseñor"se basa en las observaciones de Lee sobre su familia y vecinos, que utilizó para poner de manifiesto la injusticia racial de entonces. Y, luego, con "Ve y pon un centinela"nos aclara todas las dudas. Incluso, que Atticus, el padre de Scout, ejemplo para las generaciones de abogados del siglo XX en el fondo era un racista.

Así las cosas, se anunció la muerte de Harper Lee a los 89 años en Monroeville (Alabama). Considerada la Garbo de la Literatura en Estados Unidos, saltó a la fama por la novela antes citada, imprescindible para abordar la cuestión del racismo en el Estados Unidos del sur. Después ganó el Premio Pulitzer. Pero, entonces, le faltaba poco para alejarse de la fama que le había conseguido al lograr su gran deseo: Ser escritora.

Se había trasladado a Nueva York en busca si no de celebridad, al menos, sí de poder ganarse la vida escribiendo. Entonces, después de completar su primera novela, le vino el éxito. Siempre fue inevitable compararla con "Scout"el personaje principal de su primer título. Unas similitudes que se hicieron más obvias cuando el año pasado salió a la luz "Ve y pon un centinela"en el que "Scout"es una mujer adulta, personaje que ha servido a los investigadores para profundizar en los asuntos de clase social, valentía, compasión y género de la América Profunda.

Poco o quizá nada importó a Harper Lee, "Nelle"como la llamaban en la pequeña residencia donde vivió los últimos años de su vida siempre, lo citado anteriormente. Justo después de la publicación del primer libro, se fue con su amigo Truman Capote a recoger información porque quería hacer un artículo sobre el asesinato de una familia de Holcomb (Kansas), el cual más tarde se convirtió en el famoso título "A Sangre Fría". No le podía decir que no. Capote era su amigo del colegio. Vecino. Y necesitaba que fuese con él para ganarse la confianza de la gente del pueblo aterrorizada después de la forma tan atroz de cómo fueron asesinados los Clutter. Necesitaba a su amiga para saber exactamente qué había ocurrido en Holcomb (Kansas) después de leer el artículo en el periódico "The New York Times".

Nelle no volvió a publicar más novelas. Huía de todo aquello. Incluso, denunció a una vecina que escribió un libro sobre ella. Tampoco, participaba en las celebraciones de su título en su pueblo, cuya economía ha dependido en gran parte de todo el turismo que ha generado el trabajo de Harper Lee. Incluso, llegó a pensar que la primera versión de “Matar a un ruiseñor”, “Ve y pon un centinela”, se había perdido. Tampoco estuvo nunca muy segura. Llegó a creer que se podía haber destruido. Entonces, el año pasado se corrigió a sí misma: “No me había dado cuenta de que había sobrevivido. Me quedé tan sorprendida y encantada cuando mi querida amiga y abogada Tonja Carter lo descubrió. Después de pensarlo durante mucho tiempo y aclarar muchas dudas, lo compartí con ciertas personas en las que confío. Fue agradable escuchar que pensaban que valía la pena publicarlo. Me impresiona que sea publicado después de todos estos años”, indicó en extraño comunicado sobre la decisión de la casa editorial Harper de sacar a la venta dos millones de copias. Intentó así frenar la controversia desatada por la decisión de publicar esta novela. Pero, era prácticamente imposible:PPrimero, esas extrañas declaraciones de Lee, la cual había pasado los últimos años en esa residencia tras sufrir una embolia. Después, se decidió emprender una investigación para averiguar si Lee estaba en plenas facultades. Su aparición en público fue en 2007 cuando el entonces presidente republicano George W. Bush le entregó la Medalla Presidencial de la Libertad por su contribución a la Literatura. Llamaba sobre todo la atención que Tonja Carter no tuviese un inventario del trabajo de Lee, y a juzgar por sus conversaciones con los editores tampoco se había leído el libro.

En cambio, poco importaba ya. El libro se iba a publicar. Era un hecho. Pero, algo nunca encajó. La explicación que falta se la lleva Harper Lee a la tumba junto con otras dos que interesan mucho más a los investigadores: ¿Quién escribió realmente "A sangre fría"? ¿Ella o Truman? ¿Quién escribió realmente "Matar a un ruiseñor? ¿Truman o ella?