Champions League

Real Madrid-Chelsea

Las razones por las que Hazard apunta a titular ante el Chelsea

«No tiene dudas. Ahora, a tirar», dice Zidane sobre el regreso de la estrella belga para las semifinales de la Champions League

Hazard, en el último entrenamiento del Real Madrid antes de recibir al Chelsea
Hazard, en el último entrenamiento del Real Madrid antes de recibir al Chelsearealmadrid.com / HANDOUTEFE

«No lo veo con dudas. El otro día estuvo muy bien, lo más importante era eso. Ahora, a tirar», sentenciaba Zidane sobre Hazard en la previa del Chelsea. Parece que esta vez sí, el belga está listo para hacer aquello para lo que llegó al Real Madrid: ser la estrella y el elemento diferencial del equipo, algo que las lesiones le han negado en los casi dos cursos que lleva vestido de blanco. Ganó la Liga Europa con el que hoy es el rival del Madrid y, considerado uno de los cuatro mejores jugadores del mundo, aterrizó en Chamartín en una tarde en la que el Bernabéu casi se llena para recibirlo. Era la estrella que faltaba tras el adiós de Cristiano, pero el futbolista que nunca se había perdido un partido por lesión las ha tenido ahora todas de golpe.

Desde 2009 a 2019, con las camisetas del Lille y el Chelsea, ningún curso bajó de los 35 encuentros jugados, llegando hasta los 50 en el primer curso en Stamford Bridge, cuando levantó su primera Liga Europa con los «blues». Era una roca, pero fue llegar al Real Madrid y torcerse todo en lo físico. Fisura en el tobillo derecho con colocación de una placa, y después una larga lista de lesiones musculares que casi lo llevan al quirófano hace un mes, por si ese elemento extraño en la articulación era el que provocaba los desajustes en las fibras.

Finalmente se decidió que no se operara y un mes después está de regreso. Ante el Betis se mostró fresco y chispeante en los movimientos, lo que podría hacer que este martes Zidane apueste por él desde el principio y dejar a Vinicius como revulsivo. La otra opción es la contraria, meter en el último tramo al belga para no forzarlo y que aproveche el cansancio del rival.

Al menos, la duda es ésa y no si podrá entrar en la convocatoria, que ha sido lo habitual desde que llegó. La temporada pasada sólo pudo jugar 22 partidos y el único gol que marcó fue de vaselina al Granada. Un destello de su clase, aunque poco más pudo hacer. Este curso suma sólo 15 partidos y tres tantos (ante Alavés, Huesca e Inter de Milán, de penalti). Eso sí, parece que ha llegado a tiempo para la fase decisiva.

«Está con nosotros, estamos contentos, nos va a aportar mucho, sabemos el tipo de jugador que es», se felicitaba Zidane, encantado de que el belga pueda ser una amenaza para el que fue su club en la Premier. Su vuelta es un alivio para el ataque del equipo, demasiado basado en la clarividencia y los goles de Benzema. Si hay un socio ideal para el francés, sin duda es Eden.