«Yo jugué con ese chico»

Andre Turner, uno de los mejores bases estadounidenses que ha pasado por España, aseguró hace diez años: «Algún día diré que yo jugué con ese chico». Turner hablaba de Maciej Lampe (5-2-1985, Lodz), el polaco del Caja Laboral que amenaza hoy el juego interior del Barça en la primera semifinal de la Copa del Rey. Lampe llegó siendo un adolescente al Real Madrid. Muy pronto, con 17 años, ya compaginaba la primera plantilla, donde militaba su actual entrenador, Zan Tabak, con el filial. Pero aquel Madrid vivía tiempos convulsos. Lampe abandonó el club y recaló en el Universidad Complutense, un equipo de Segunda División. Allí fue donde Turner presumió de compañero.

La intuición del base norteamericano no terminó de concretarse. Lampe emigró a Estados Unidos con 18 años y se pasó tres siendo carne de banquillo en la NBA. New York, Phoenix, New Orleans y Houston fueron sus destinos. Apenas 64 partidos antes de volver al baloncesto europeo y recorrerse medio continente para terminar en Vitoria. Lampe llegó hace un año al Caja Laboral. Debutó en la pasada edición de Copa del Rey y, cuando las lesiones se lo han permitido, se ha convertido en un jugador decisivo para el equipo. La salida del banquillo de Dusko Ivanovic, con quien no congeniaba precisamente, y la llegada de Tabak han hecho el resto. «Él me conoce desde que era prácticamente un niño y eso me beneficia. Ha llegado con una actitud positiva y nos ha ayudado mucho, porque tiene muy claro lo que quiere», comenta de su actual entrenador.

El Baskonia llega a la semifinal contra el Barça con una racha de 13 victorias seguidas entre Liga Endesa y Copa. «Este es nuestro año para la Copa», asegura Lampe después de superar al CAI Zaragoza y ver cómo los seguidores vitorianos volvían a empujar al equipo desde la grada del Fernando Buesa Arena. Enfrente estará el Barcelona, con tres ex baskonistas en sus filas, Marcelinho Huertas, Brad Oleson y Pete Mickeal. Los tres fueron importantes en el clásico ante el Madrid en cuartos, pero quien realmente preocupa en los azulgrana es Navarro. Sus problemas físicos no remiten, sigue muy lejos de estar al ciento por ciento y volverá a ser dosificado al máximo por Xavi Pascual.