Videos

Bilbao, lista para el Mundial de saltos de gran altura

El estadounidense Steven LoBue, en uno de sus saltos en la anterior serie de las Azores, es segundo
El estadounidense Steven LoBue, en uno de sus saltos en la anterior serie de las Azores, es segundolarazon

El 20 de septiembre, el Puente de la Salvserá testigo del espectáculo -saltos desde 27 metro de altura- que ofrecerán los 14 participantes de las series mundiales Red Bull Cliff Diving.

Con diecisiete años de historia y seis desde que las competiciones aisladas de cliff diving pasaron a ser series mundiales, la penúltima parada de las Red Bull Cliff Diving World Series 2014 visitará España por primera vez y lo hará en el corazón de Bilbao y con el museo Guggenheim como telón de fondo.

Tras haber pasado por Cuba, Estados Unidos, Irlanda, Noruega y Portugal, la élite mundial del clavadismo llegará por fin a España para participar en la prueba el 20 de septiembre antes de que las series coronen al ganador y concluyan su temporada el próximo octubre en México.

Los saltadores están listos para afrontar las dos últimas paradas de las series mundiales de 2014 en las que se decidirá quién ha sido el mejor de la temporada. Julio fue un mes intenso, con tres competiciones en cuatro semanas, por lo que las vacaciones de verano han sido bien merecidas. Ahora solo queda volver a la competición. En menos de 10 días, el bilbaíno Puente de la Salve será testigo del espectáculo que ofrecerán los 14 participantes que conforman la prueba.

En la última parada antes de las vacaciones, en las Azores, el estadounidense Steven LoBue consiguió su primera victoria en dos años para recortar distancias en la clasificación general con Gary Hunt. El triple campeón quiere revalidar su título, pero la cosa está que arde con el colombiano Orlando Duque en tercera posición pisando los talones. La de Bilbao va a ser una parada muy emocionante y podría ser decisiva.

Saltos a 27 metros de altura -desde la plataforma que se construirá especialmente para poder acoger la competición-, una altura casi tres veces más alta que la del trampolín olímpico (10 metros) y en la que los saltadores, protegidos sólo por su concentración, técnica y control físico, tocarán el agua en tan sólo 3 segundos, alcanzando velocidades de hasta 90 km/ h.