Nairo Quintana: «He demostrado que puedo ganar a Froome»

El colombiano afronta este año el reto de disputar el Giro antes del asalto al Tour

Nairo Quintana (Tunja, Colombia, 1990) ha cambiado de estrategia para intentar el asalto al Tour. El amarillo en París es para él una deuda pendiente, un asunto que pretende resolver este año. Es la única grande que le queda por ganar y para hacerlo en 2017 ha decidido afrontar antes el Giro en su edición número 100. Desde 1998, cuando lo consiguió Pantani, nadie ha logrado ganar las dos carreras en el mismo año, pero a Nairo no le asusta nada.

–¿Cómo afronta el desafío de correr Giro y Tour?

–Es un reto bastante grande. Hemos tomado la decisión de hacerlo por el centenario del Giro y por la deuda que tenemos con el Tour. Para mí es un reto y al equipo le hace mucha ilusión. Esperamos afrontar las dos al ciento por ciento y si nos sale será una hazaña increíble.

–¿Se ha convertido el Tour en una obsesión?

–Para nada. Es una carrera con la que tenemos una deuda y es un sueño, pero es una carrera más que tenemos que intentar ganar. El objetivo principal para mí y para el equipo por la deuda que tenemos es el Tour de Francia. Todo va a girar en torno al Tour. Afrontamos el Giro de Italia no como un paseo ni como entrenamiento, pero sí con mucha más tranquilidad.

–¿Ha cambiado la preparación este año?

–La preparación y las competiciones van a ser un poco diferentes. Hemos ido un poco más tranquilos porque sabemos que el Giro será muy exigente y no podemos estar ahora en un gran momento como hemos hecho otros años, sino un poco más tranquilo para poder estar bien en las dos carreras. Otros años íbamos un poco más rápido.

–Correr antes el Giro, ¿le ayudará a no pensar demasiado en el Tour?

–­Sí y no porque hemos hecho otro tipo de carreras antes del Tour que también han sido importantes para el equipo y hay cierta presión por ganarlas, por coger los puntos para el World Tour. Sería algo parecido. El Tour es el Tour y no se nos va a olvidar lo que es ni se nos va a olvidar a qué carreras nos vamos a enfrentar ni con qué rivales nos vamos a encontrar.

–Contador dice que la clave para hacer Giro y Tour es gastar lo justo en el Giro y en junio descansar mucho.

–Se puede tener en cuenta la experiencia de otros corredores que han hecho ese doblete. Es importante saber cuáles fueron sus sensaciones y de qué manera pueden llegar bien a las dos carreras.

–Su rendimiento en la segunda gran vuelta que hace en la temporada suele ser mejor.

–Suelo estar bien en las dos. He andado parecido. Tengo la tranquilidad de que si estamos en las dos vueltas se va a tener un gran rendimiento.

–¿Se siente inferior a Froome?

–Inferior, no. Sabemos que él está pasando por un gran momento, el mejor de su carrera deportiva y nosotros vamos en desarrollo, en crecimiento. Tenemos un buen equipo que siempre hace todo con corazón, [los compañeros] entregan todo lo que tienen y eso me compromete a luchar y a poder vencerlo. Lo hemos vencido en alguna ocasión en carreras un poco más pequeñas y eso da un impulso para seguir luchando por intentar ganarle.

–¿Qué aprendió del año pasado?

–Sobre todo cuando tuve mi época mala en el Tour, a saber luchar, a no rendirse y a seguir luchando por lo que uno sueña. Tenía un equipo detrás que me estaba respaldando y los aficionados que me apoyaban. No podía dejar tirado el trabajo de todo un año en un momento. Eso tiene más mérito seguramente que haber ganado y es un orgullo haber terminado de nuevo en el podio gracias al equipo que me dio ese gran apoyo para lograrlo.

–¿El presupuesto de Sky es una barrera insuperable?

–Sí que hace algunas diferencias. Tener menos presupuesto nos limita a tener un poco menos de capacidades de las que nos gustaría poder tener, pero tenemos un gran equipo que lo entrega todo y lo entrega de corazón al ciento por ciento para intentar ganar. Es más importante que tener corredores de millones y que no hagan las cosas acordadas.

–¿Ganar la Vuelta a Froome fue una liberación?

–Más que liberación fue un premio al trabajo que se ha hecho, una recompensa a toda esa labor, al trabajo del equipo, que hemos entregado todo. Demostramos que podemos ganarle, no sólo a mí sino al equipo. Somos un equipo joven y seguimos aprendiendo y eso nos hace darnos cuenta de que el trabajo está bien hecho.

–¿Le da pena no defender el número «1» en la Vuelta?

–Sí, un poco sí. Pero las tres no se pueden hacer.