Y Nairo rompió a llorar

Cuando a orillas del bello lago de Annecy, a mediodía, Eusebio Unzue habla de Nairo Quintana, se le endulza la voz. No puede evitarlo el técnico navarro, que ha visto tanta estrella pasar, fabricarse, crecer a su amparo y marcharse. Le preguntan a Eusebio que, de todos esos grandes corredores a los que ha dirigido, cuál se asemeja más a Nairo Quintana. Y responde sin dudar: «En cuanto a visión de carrera es igual que Miguel Indurain. Cuando llega al bus después de las etapas es como si abriera un libro y empezara a contar todo». Es vivo, mucho. Y tiene carácter, aunque no lo parezca. No le achantan ni los tallos belgas de dos metros, gigantes a su lado. A alguno ya le ha tirado un botellín a la cabeza porque intentaba pasarse con él. A otro lo fue a buscar al autobús después de una etapa.

«Y de tímido no tiene nada», dice Eusebio ante la sorpresa de la parroquia que lo escucha bajo el sol acuciante de Annecy. «Puede dar esa impresión hacia fuera, pero con el equipo es todo lo contrario, de los más bromistas». Llevaba el colombiano todo el Tour paseando por la jaula que es la zona mixta en las traseras del podio. Tras las vallas, centenas de micrófonos, cámaras de vídeo y grabadoras. Vestido de blanco, impoluto e impasible, allá donde le mandaban iba, ni una mala cara, ni un gesto de enfado, apenas un parpadeo, a todo respuestas correctas, tranquilas y de voz suave y queda. Pero arriba de Annecy, en el Semnoz, donde el Tour no había llegado nunca antes, Nairo Quintana subió al cielo como antes jamás. No aguantó, no pudo más en la sala de prensa nada más entrar, sentarse, respirar y ver que había ganado la última etapa de montaña, la inédita, y que escala al segundo puesto del podio. Y que será hoy coronado en París como el mejor escalador de esta carrera centenaria. Que todo lo que ha hecho en un solo Tour, en un solo día también, es lo que logró Lucho Herrera, el más brillante ciclista colombiano hasta el momento de la historia, una historia que pide más páginas en blanco para todo lo que Nairo está dispuesto a contar. Pues lo que más le gusta a Nairo, por encima de ser segundo hoy en los Campos Elíseos e incluso más allá de su triunfo de etapa en Semnoz, es el maillot de puntos rojos. Por eso rompió a llorar. El último colombiano que lo ganó fue Mauricio Soler, «él me regaló la medalla que he llevado al cuello todo el Tour para que me diera suerte, y para él va este triunfo», dijo entre lágrimas. «De pequeño nunca soñé tan grande», dice.

Contador pierde el podio

«Ha sido un mal día». No había mejor forma de resumirlo por parte de Alberto Contador, que a ocho kilómetros del final, cuando atacó Joaquim Rodríguez, no pudo seguir la rueda del catalán, de Quintana y de Froome. «Cuando uno da todo lo que tiene, no hay más. Felicito a los que han sido mejores. El objetivo en este Tour era ganar, pero ha sido imposible porque un corredor ha sido superior al resto», añadió. El ciclista español aseguró que ha tenido problemas de rodilla durante todo el Tour.

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-Clasificación de la 20ª etapa:

.1. Nairo Alexander Quintana (COL-Movistar) 3h 39:04

.2. Joaquim Rodríguez (ESP-Katusha) a 18

.3. Christopher Froome (GBR-Sky) a 29

.4. Alejandro Valverde (ESP-Movistar) a 01:42

.5. Richie Porte (AUS-Sky) a 02:17

.6. Andrew Talansky (USA-Garmin) a 02:27

.7. Alberto Contador (ESP-Saxo Tinkoff) a 02:28

- Clasificación general:

.1. Christopher Froome (GBR-Sky) 80h 49:33

.2. Nairo Alexander Quintana (COL-Movistar) a 05:03

.3. Joaquim Rodríguez (ESP-Katusha) a 05:47

.4. Alberto Contador (ESP-Saxo Tinkoff) a 07:10

.5. Roman Kreuziger (CZE-Saxo Tinkoff) a 08:10

.6. Bauke Mollema (HOL-Belkin) a 12:25

.7. Jakob Fuglsang (DIN-Astana) a 13:00

.8. Alejandro Valverde (ESP-Movistar) a 16:09

.9. Daniel Navarro (ESP-Cofidis) a 16:35

10. Andrew Talansky (USA-Garmin)