Colón se tiñe de blanco con aficionados del Tottenham

Hinchas del Tottenham han ido llegando a lo largo de toda la mañana desde diversos puntos de Madrid hasta la Plaza de Colón, donde está la “Fan Zone” del equipo londinense.

La plaza de Colón parece Trafalgar Square. Hinchas del Tottenham han ido llegando a lo largo de toda la mañana desde diversos puntos de Madrid e incluso hay quienes han venido directamente del aeropuerto.

Los gritos y cánticos se oyen desde varios cientos de metros a la redonda, y los aficionados londinenses que los escuchan también se animan a cantarlos. Llegamos a Colón y nos encontramos con una marea blanca. Dos policías controlan y cachean a todo aquel que quiere entrar a la “fan zone”, y una vez dentro, pancartas, bolsas llenas de latas de cervezas, una carpa en el centro de la plaza y muchos ingleses de fiesta. Solo se ven dos colores, el blanco de las camisetas del equipo y el rojo, pero no el del Liverpool, sino el de los cuerpos quemados al sol de aquellos que han decidido no ponérselas.

En el Sámur, atienden a un señor que se ha tropezado en uno de los escalones que llevan al teatro Fernán Gómez, cerveza en mano, no parece muy preocupado por sus heridas y si por volver al centro de la plaza. Allí sus compañeros llevan desde las once de la mañana bebiendo y disfrutando de un acontecimiento histórico.

Dentro de la carpa, una pantalla gigante muestra los highlights de todos los partidos de fase del KO del equipo de Pochettino. La hinchada lo vive como si fuera en directo. Cantan los goles, entonan sus canciones y bañan a la multitud en cerveza cada vez que se acaba un partido o los Spurs marcan algún gol. Con la eliminatoria de cuartos ante el City se llega al punto álgido.

La cerveza corre como si fuera agua en una cascada. Un joven inglés nos pregunta dónde puede rellenar su vaso, las colas no son muy largas, cinco euros la pinta y tres el refresco, libras bien invertidas. También hay foodtrucks esperando a servir la comida. Hamburguesas a ocho euros con colas interminables y un puesto de bocadillo de calamares sin gente esperando.

No hay niños, pero sí gente de todas las edades. Es un museo andante de camisetas del Tottenham. Curiosamente la camiseta umbro con Holsten de los años noventa es la que más se ve, mucho tiempo lleva esta afición esperando este momento. Otros posan con la camiseta de esta temporada y detrás Madrid 19, es un día histórico. Hay pancartas alabando a Pochettino, una pidiéndole a Lucas Moura que por favor repita su actuación de semifinales y muchas avisando de que este año es el del Tottenham.

En la fan zone todo es una fiesta. La policía nos comenta que son aficionados completamente inofensivos, que no son hooligans peligrosos. Vienen, beben, gritan y disfrutan. Hasta las seis de la tarde Colón será Nelson, entonces aquellos afortunados que tengan entrada irán hacia el Wanda y los demás buscarán bares donde seguir bebiendo y disfrutando.