El gol que nadie imaginó

Saúl decidió el partido con una extraordinaria jugada individual. «Todo lo que le está pasando es por creer en lo que tiene», dice el Cholo

Simeone lo tenía todo planeado. Torres y Griezmann presionaban arriba desde el comienzo. Fernando se iba a una banda para saltar con Bernat cuando había pelotazos largos. Guardiola mandaba a Xabi Alonso a saltar con Torres para proteger al pequeño lateral. Pero el gol de Saúl no entraba en ninguna previsión. Thiago equivocó el lado que tenía que proteger cuando le encaró el centrocampista del Atlético, que fue avanzando y se fue animando Dejó por el camino a Bernat y Xabi cambiándose la pelota de pie, encaró a Alaba y lanzó a la esquina donde Neuer no podía llegar. «Tiene mérito el gol de Saúl, aunque estuvimos un poco blandos», se lamentaba después el veterano centrocampista español.

«Es el gol más importante y también el más bonito de mi carrera», dice Saúl, que ya marcó uno de chilena en la goleada al Real Madrid en el Calderón el año pasado. «Tenía la portería entre ceja y ceja», reconocía después. Lo podía haber marcado Maradona. O Messi, aunque la prudencia la puso Pep Guardiola. «Estimo mucho a Saúl, aunque no lo conozco personalmente, pero estaría bien para él no compararlo con Messi», decía el entrenador del Bayern tras la derrota. Simeone intuyó el disparo desde el banquillo. «Estaba en diagonal a la jugada. Sale muy bien del primer regate y eso le hace salir con mucha potencia. Él la tiene y tiene muy buen uno contra uno. Cuando salió del último regate no vi mucho más. Imaginé el tiro», relataba el Cholo en la sala de prensa. «Dejamos acercarse demasiado a Saúl. Es lo único que podemos reprocharnos», decía Manuel Neuer el portero del Bayern después del partido.

Saúl se exhibió en ataque y se dejó la vida en defensa. Algo que no sorprendió a Simeone. «Ante este momento brillante de Saúl no sería bonito contar todas las intimidades y todo lo que he hablado con él porque parecería que me quiero poner estrellas, pero todo lo que le está pasando es por insistir y por creer en lo que él tiene», asegura el técnico rojiblanco. Para Guardiola tampoco es una rareza lo que hizo ayer el canterano rojiblanco: «Es muy buen jugador. El fútbol español tiene otro gran talento».

«Venga, Saúl de las tuyas», le gritaba un aficionado en la segunda mitad. Como si ya estuviera obligado a repetir ese gol en cada ocasión en que pisara el área. «Saúl, qué nivel», le gritaba otro al despejar un balón en su área. El centrocampista rojiblanco sirve para todo. Incluso para la Selección, a la que ya acudió el verano pasado como aprendiz, aunque Simeone no quiso valorar la posible llamada de Del Bosque para la Eurocopa. «Respeto mucho el trabajo del seleccionador», dice.

Saúl representa el espíritu del Atlético, el alma que traslada Simeone a la plantilla lo pone él en el campo. Es el tipo del jugador que quiere el técnico, el que lo deja todo en el campo por el grupo. Por eso fue el único sustituido cuando el partido ya llegaba a su fin y acababa de ver una tarjeta. «Le puedo contar a la gente situaciones íntimas del grupo. El martes le preguntamos a Tiago, que todavía no puede jugar, si quería estar con nosotros en la concentración. En seguida dijo que sí. Carrasco, con el tobillo inflamado, pidió jugar. Óliver, después de quedarse fuera en varias convocatorias, le vino fiebre y me dijo antes del partido, cuando ya estaba en la lista que no estaba en condiciones de dar al equipo lo que necesita. Eso es el Atlético hoy», explica su entrenador.

Saúl fue el autor del gol, el que pone al Atlético en ventaja para la vuelta, el que deja la eliminatoria como la imaginaba Simeone. Pero no fue el único destacado por su entrenador. El Cholo elogió el trabajo de Augusto, que aparecía por todos lados para despejar con cualquier parte del cuerpo los balones que amenazaban a Oblak. «Nos pone contentos haber acertado con su fichaje», reconoce Simeone.