El Real Madrid, otra Liga a remolque

Vuelve a estar lejos del liderato antes de acabar la primera vuelta del torneo. Una situación repetida en las últimas temporadas mientras rompía récords en Europa.

Año nuevo y todo sigue igual para el Real Madrid en la Liga. Hace tiempo que el equipo, y sus aficionados, se han acostumbrado a ir a remolque en este torneo, en el que a sus futbolistas les cuesta poner toda la atención necesaria. Con el empate en Villarreal vuelven a ser siete los puntos de desventaja con el Barcelona, un panorama que cada temporada es parecido para el Real Madrid a estas alturas en los últimos tiempos. «Queríamos ganar, tuvimos opción de cerrar el resultado, no lo hicimos y nos empataron. Agarramos el punto y seguimos hacia adelante», decía Solari en la misma sala de prensa del estadio de La Cerámica quitándole dramatismo al tropezón. El técnico ha reactivado el vestuario en muchos sentidos y ya ha ganado su primer título, pero en la Liga todavía le queda mucho trabajo por delante, como lo tuvieron Mourinho, Ancelotti, Benítez, Zidane y Lopetegui. Ellos son los que han ocupado el banquillo de Chamartín en los últimos ocho cursos, en los que el Madrid sólo puede presumir de haber levantado dos veces el trofeo. Precisamente, en esas dos ocasiones el equipo era líder en la jornada 17. También estaba en esa situación en el segundo año de Ancelotti, pero el buen momento no se pudo mantener y pagaron el bajón que llegó después del Mundial de Clubes.

En las otras cinco temporadas, incluyendo la actual, el Real Madrid ya estaba en desventaja sin haber acabado todavía la primera vuelta por culpa de su falta de regularidad, imprescindible para ser campeón de España. El año mas dramático fue el 2011-12, el último de Mourinho en el cargo, que a estas alturas estaba tercer clasificado a 16 puntos del Barcelona. El curso siguiente, Ancelotti también estaba en esa misma posición, aunque con sólo cinco unidades de retraso respecto al líder. Y en similar situación numérica se produjo el relevo de Benítez por Zidane en enero de 2016. Aunque el francés estuvo cerca de la remontada, el título y la alegría llegaron por Europa, como suele ser costumbre en este Madrid.

La siguiente Liga la ganó Zizou y en la pasada se volvió a las andadas, con ocho puntos de desventaja y en tercera posición a dos jornadas de llegar a la mitad de la competición. Tenía el Real Madrid 34 puntos por los 30 de ahora, aunque es cierto que a día de hoy la distancia con el liderato es un poco más corta. La causa es esta Liga más democrática en la que todos pinchan y nadie es capaz de ganar siempre. El Barcelona está amenazando con dar el estirón definitivo, mientras los blancos no encuentran la forma de no tropezar.

En Villarreal tuvieron el control del choque en la primera mitad, remontaron pronto el primer gol y se sintieron superiores. Esa sensación les llevó a bajar el ritmo y los amarillos se apoyaron en su necesidad para mantener la fe en el empate. Fueron perdonados por Lucas Vázquez y Marcelo, protagonistas de las dos ocasiones más claras, y el que no falló fue Cazorla para devolver al Madrid a su realidad en la Liga.

Queda tiempo, puntos y jornadas para darle la vuelta, pero para ello necesitan sumar de tres en tres y mantener la concentración durante noventa minutos. Algo que les sale natural en las rondas eliminatorias de la Liga de Campeones, pero que olvidan cuando se acerca el fin de semana y cambian de balón. El de las estrellas es el que les gusta, mientras el otro les produce algo de pereza. En ese esfuerzo a largo plazo el Real Madrid se pierde y la cabeza se le va a esa Champions que siempre le es fiel. Necesitan los blancos que el Barça pinche tres veces para remontar y ellos se han negado a sí mismos el derecho a volver a fallar. Año nuevo, pero la misma Liga para el Real Madrid.

Benzema marca el doble

El año pasado por estas fechas el francés había marcado cinco goles, menos de la mitad de los que acumula este curso. Con el que marcó al Villarreal alcanza los doce tantos el pichichi madridista en lo que va de curso por delante de Bale. Benzema ha hecho siete goles en Liga, tres en Champions, uno en la Copa del Rey y otro en la Supercopa de Europa. El Mundial de Clubes es la única competición en la que no ha encontrado portería el galo, mucho más afilado dentro del área rival desde que se fue Cristiano.