España, medalla de bronce en el Mundial de Baloncesto femenino

En un campeonato que ha sido de todo menos sencillo, España sigue instalada en la élite.

Desde 2013 España no se baja del podio. Dos veces campeona de Europa, plata olímpica y mundial, bronce en otro Eurobasket y el bronce en su Mundial. Seis años, seis, sin bajarse del podio convierten a este equipo, si no lo era ya, en un grupo legendario. En un campeonato que ha sido de todo menos sencillo, España sigue instalada en la élite. El equipo no sido el de otras veces en cuanto juego, pero en carácter, corazón, orgullo, fe e intensidad son únicas. Pocos grupos en el deporte mundial tienen la capacidad competitiva de las chicas dirigidas por Lucas Mondelo y eso se tradujo en el bronce ante Bélgica.

Para intentar cambiar la dinámica de los malos arranques de partido, Lucas Mondelo decidió introducir una novedad en el quinteto titular. Aparecio Casas. La alero ha sido en el torneo una de las revolucionarias del equipo saliendo del banquillo. Su aportación atrás ha sido decisiva en los partidos apretados y la medida buscaba incomodar a uno de los equipos más ofensivos del campeonato. Pues tampoco dio resultado. España salió con la misma falta de ideas que en jornadas anteriores. Apenas habían pasado segundos del salto inicial y el técnico se vio obligado a pedir el primer tiempo muerto (3-10). La salida de Alba Torrens ayudó a aliviar la espesura en ataque. Entre Torrens y el acierto desde la línea de tres la superioridad de Bélgica desapareció. España anotó en el primer parcial las mismas canastas de tres que de dos, tres, pero el porcentaje en los tiros más lejanos devolvió la igualdad.

La Selección logró mantener a las bajitas jugonas de Bélgica controladas. Se trataba de alcanzar una velocidad de crucero en ataque y eso llegó con Ndour y Xargay. La alero estuvo tan acertada como en el partido inaugural ante Japón y la pívot demostró que centrada es una jugadora diferencial. Entre ambas sumaron 19 de los 32 puntos de España al descanso y, lo que era más importante, España mandaba y daba la sensación de tener el partido controlado.

El equuipo creció un poco más a la vuelta de vestuarios. La Selección empezó a jugar con la alegría que apenas se ha visto en el Mundial y despegó (46-36). Quedaba por comprobar si cuando mejor estaba el equipo se iba a repetir la historia del día de Australia y España se iba a desenchufar. Xargay y Ndour siguieron produciendo y el acierto de Torrens dejó al grupo con el podio a la vista al final del tercer cuarto (55-43), pero..

El arranque, otra vez el arranque de un cuarto, fue igual que el del último cuarto ante Australia. España se paralizó y Bélgica protagonizó un parcial de 0-11 e incluso tuvo un ataque para ponerse por delante. Tocaba volver a empezar. Una de las múltiples virtudes de la Selección es su capacidad para revolverse ante los contratiempos. Una canasta de Gil, un triple de Alba y cuatro puntos de Nicholls devolvieron otro colchón, 64-58 con 1:30 por delante. Quedaba cerrar el partido. Y España lo hizo con un robo de su capitana, Laia Palau, y un triple de Xargay. España, después de todos los contratiempos, sigue en el podio. Otra medalla para un grupo legendario.

67. España (15+17+23+12): Palau (2), Casas (0), Xargay (17), Nicholls (6) y Ndour (13) –quinteto titular– Gil (2), Cruz (3), Ouviña (9), Torrens (15) y Domínguez (0).

60. Bélgica (15+12+16+17): Allemand (8), K. Mestdagh (15), Delaere (2), Meesseman (24) y Linskens (4) –quinteto titular– Vanloo (0), Wauters (2), Mestdagh H. (3) y Carpreaux (2),

Árbitros: Bermúdez (Mex), Forsberg (Din) y García (Ven). Sin eliminados. Técnica a Ndour.

Incidencias: 5.000 espectadores en el Pabellón Santiago Martín. Partido correspondiente a la lucha por la medalla de bronce. La Reina Letizia presenció el partido en la grada.